Nicolás Maduro agradeció este jueves a Dios por tener como contraparte al líder opositor Juan Guaidó pues a su juicio no representa una amenaza.
«Las sanciones son crímenes. Las sanciones son criminales y las vamos a repudiar en todos los sentidos. Guaidó es una rata de cañería. El bobolongo. ¿quién tiene el teléfono de ese estúpido? Sino le contesta ni a sus propios dirigidos. Hay que darle gracias a Dios por habernos mandado a un imbécil como Guaidó. Mil años vamos a gobernar con un imbécil como él. Hay que pedirle a Dios que lo mantenga», enfatizó Maduro en un acto.
Afirmó además que los carnavales de este año serán los mejores en mucho tiempo. «Este fin de semana lo que nos toca es bailar, bailar y bailar. Playa y arenita. A mí también me sale. Cilia y yo nos vamos tres días a la playa. En cualquier momento me llegó por allá por Falcón, La Guaira, Margarita», acotó.
Por otro lado indicó que esta Venezuela «es muy distinta a la que era cuando estábamos jóvenes. Tenemos que escuchar a esta nueva generación».
«Estamos obligados a escuchar a la Venezuela nueva. A la Venezuela joven y ayudar a que esa generación se levante con valores. Con conocimiento. Con sabiduría y una poderosa formación ideológica revolucionaria», apuntó.