El manejo frecuente de dinero, el contacto con docenas de pasajeros en un día, la poca limpieza de las unidades e incluso de las manos durante la jornada, convierte a los transportistas en foco de contaminación
Aunque aún no hay una declaración oficial de los bloques del transporte, ya algunos choferes están tomando previsiones para frenar el paso del covid-19. Pese a que por ahora no está contemplada la suspensión del servicio, esta podría darse dependiendo de cuánto se propague el virus.
El manejo frecuente de dinero, el contacto con docenas de pasajeros en un día, la poca limpieza de las unidades e incluso de las manos durante la jornada convierte a los conductores en foco de contaminación y, por tanto, se están activando y de manera individual toman sus medidas de prevención: incentivan al uso del gel antibacterial y de toallas húmedas, así como el lavado frecuente de las manos, principalmente por parte de los colectores.
Los directivos están recomendando a los choferes y a los colectores evitar el contacto físico con los pasajeros. Si tienen que trabajar con tapabocas, lo harán, aunque esperan más indicaciones de las autoridades sanitarias.
Rodemir Mesone, transportista de Caricuao, señaló que no están preparados para enfrentar la epidemia y que están muy expuestos.
“Nos tomamos todo a la ligera, por las redes se cuela mucha información y la mitad no ayuda a entender lo que pasa. Este es un virus con un contagio alto. Una vez que entre la enfermedad a una camioneta se complicarán las cosas. Hay que reforzar las campañas de información y mantener la higiene. Si debemos dejar de prestar el servicio, ya será a título propio”, señaló Mesone.
Otros, ante la falta de productos de higiene para prevenir el contagio, podrían optar por limitar la cantidad de usuarios en las unidades de transporte. Así lo afirmó un conductor de la línea Antímano-Capitolio, quien también hizo énfasis en que no es una decisión que hayan tomado como bloque, sino que dependerá de cada uno de sus integrantes.
Luego del anuncio de la vicepresidenta Delcy Rodríguez, confirmando dos casos positivos para covid-19, el flujo de los usuarios en el transporte público no disminuyó. La gente comentaba las noticias y compartía imprecisiones en la información: aumentando los casos positivos, los fallecidos e incluso especulando sobre una presunta vacuna, cosa que ha sido desmentida por la OMS.
Comparada con otros días de esta semana, la cantidad de personas que había en el sistema Metro de Caracas desde la mañana del 13 de marzo fue baja. La suspensión y cierre de lugares con aglomeraciones de personas hecha por el presidente Nicolás Maduro dejó con más dudas que certezas a algunas personas, que por prevención preferían no usar el subterráneo e irse a pie o tomar otro tipo de transporte.
En los parlantes de las estaciones solo sonaban mensajes viejos del sistema y algunos trabajadores consultados por un equipo periodístico del portal Crónica.Uno afirmaron que desconocían el protocolo a seguir luego del anuncio del Gobierno que instruía a hacer uso obligatorio de mascarillas para ingresar al Metro.
Un operador de la estación Miranda afirmó que el sistema sería suspendido durante todo el fin de semana para hacer una limpieza general y que la exigencia de mascarillas se haría a partir de este lunes 16 de marzo.
Previo a eso, el presidente del Metro de Caracas, César Vega, declaró a la emisora Unión Radio que no cuenta con tapabocas “disponibles para entregarle a los usuarios del Metro” y que deben ingresar con unos propios. “Solo podemos garantizarlos para nuestros trabajadores”, resaltó.
Mabel Sarmiento/Alberto Torres/Crónica.Uno