Los fallecidos en Italia con el coronavirus alcanzaron hoy los 1.809, lo que supone un aumento de 368 en las últimas veinticuatro horas, según el último balance comunicado por el jefe de la Protección Civil, Angelo Borrelli, en rueda de prensa.
Este aumento del número de víctimas mortales es el más alto registrado desde que surgiera el foco, a finales del mes de febrero.
El número de enfermos actualmente en Italia, principal foco de Europa, es de 20.603 personas, 2.853 más en comparación con los datos de ayer sábado, y los curados son 2.335, lo que equivale a un aumento de 369 respecto al último boletín.
Con ello, el número de contagios totales desde la detección del brote es de 24.747, contando los enfermos, los fallecidos y los curados, mientras que las pruebas realizadas a la población ascienden ya a 124.899.
Las regiones con más contagios están en el norte: Lombardía con 10.043 casos positivos, seguida por Emilia-Romaña (2.741), Véneto (1.989), Piamonte (1.030) y Las Marcas (centro) con 1.087 enfermos.
Del total de contagiados, 9.268 personas se curan en sus propios domicilios, 9.663 están hospitalizados con síntomas y 1.672 reciben cuidados intensivos, un 10 % del total aproximadamente.
Solo en la región de Lombardía, la más afectada, con capital en Milán, los contagias actualmente son 13.272, un aumento de 1.587, mientras que los muertos con el patógeno ascienden a 1.218, informó el consejero regional de Salud, Giulio Gallera.
Una de las emergencias de esta región norteña es la escasez de puestos en terapia intensiva, aunque en las últimas horas los pacientes que requirieron esa terapia ha aumentado solo en 25, «un dato mucho más reducido» que en los últimos tiempos, señaló.
En Italia preocupa la posibilidad de que el virus sobreviva en la superficie de los objetos y una persona pueda infectarse al tocarlos.
En este sentido el presidente del Instituto Superior de Sanidad (ISS), Silvio Busaferro, explicó que existen «datos experimentales» que demostrarían que el coronavirus puede vivir «algunas horas o días» en distintos tipos de superficies.
Pero indicó también que se trata de un patógeno «muy sensible» a los desinfectantes a base de alcohol y cloro y abogó por lavarse las manos frecuente y correctamente, también con jabón, además de mantener una distancia prudencial con otros sujetos.
Por ello las autoridades italianas insisten en la necesidad de que toda la población permanezca en sus casas para tratar así de contener la pandemia, siguiendo las instrucciones del Gobierno, reseña EFE