Para pasar la sequía, a algunos solo les queda pagar hasta 20 dólares por 1.000 litros de agua, a servicios privados. Algunos sectores pasan entre 10 y 15 días sin el vital líquido
En el municipio Carrizal, estado Miranda, no surten de agua desde la semana pasada, cuando el bombeo previsto llegó solo unas cuantas horas del jueves 19 de marzo. Desde entonces, ni una gota sale de los grifos. San Antonio de los Altos, Los Teques y áreas vecinas comparten la misma suerte, en plena epidemia del covid-19, para cuya contención, la primera medida, repetida hasta el cansancio por la Organización Mundial de la Salud y en lo interno, el propio gobierno nacional, es el lavado de manos y aseo en general.
Mientras el alcalde de Los Salias, José Fernández “Josy”, calificara en su cuenta en Twitter, como “un descaro” el mensaje recibido por parte del gerente de Hidrocapital, Miguel Salazar, de que “luego de haber bombeado agua por dos días continuos al municipio Los Salias, suspendería el servicio, hasta el lunes que viene”, lo cierto es que los habitantes de la zona niegan haber recibido el servicio en ningún momento de la semana del 23 al 27 de marzo.
A su vez, el alcalde de Carrizal, Farith Fraija, en un tuit fijado el 25 de marzo, indica que por falla en el Sistema Tuy, que alimenta a los Altos Mirandinos, no se pudo cumplir “con el ciclo de distribución semanal para el municipio. Y añadió: “No tenemos precisión de cuándo colocarán el servicio de agua. Con los jefes de comunidad y líderes vecinales estaremos planificando el envío de cisternas”. Sin embargo, algunos vecinos de la zona reportan no haber recibido cisternas por parte de la alcaldía.
Sin embargo, al revisar la cuenta oficial de Twitter de Hidrocapital, no aparece ninguna mención a esa falla en el sistema Tuy que afecte estos municipios de Miranda, ni el lugar o la zona donde se esté reparando algo, por lo que reina una incertidumbre total en un área que permanece aislada por las medidas del covid-19, con alcabalas situadas en la carretera Panamericana, que impedirían que los habitantes altosmirandinos se trasladen a otras zonas donde puedan obtener agua, como es la capital del país, donde muchos tienen familiares.
En medio de la crisis por el agua se registran aglomeraciones de personas en las instalaciones de Agua Mineral La Roca, ubicada en Carrizal, por parte de personas desesperadas por abastecerse, según denunció el tuitero Raúl Pulido @pulidorq.
En residencias de la clase media, ante la imposibilidad de contratar en forma colectiva cisternas de agua, por sus altos costos, los vecinos, en forma individual, recurren a tanques colocados en camionetas pick up, que cobran hasta 20 dólares por suministrar 1.000 litros de agua. Pero no todos pueden cancelar esos costos. Mientras, la precaución por protegerse del coronavirus se reduce a quedarse en casa. No hay agua ni para lavarse las manos.