Vecinos de diferentes sectores señalan a una cisterna azul en la que se lee «Agua Potable», que apoya a la alcaldía en las jornadas de desinfección. «El agua en el llenadero es gratis», denuncian los afectados
Habitantes de diferentes comunidades de Guarenas, estado Miranda, denuncian que uno de los camiones cisternas que apoya a la alcaldía en el abastecimiento de agua en los barrios y en las jornadas de desinfección, cobra 35 dólares por viaje a los vecinos.
La denuncia que llegó a la redacción del Diario La Voz señala que el conductor, de quien no se logró obtener su identificación, ha solicitado los pagos en divisas a personas que requieren del servicios en comunidades de bajos recursos como Las Clavellinas, La Comunidad, El Calvario, Copacabana, 29 de Julio, La Montañita.
«El agua en el llenadero es gratis, a ellos no les cuesta nada y a ese señor la alcaldía le paga por prestar sus servicios y por cada viaje», refirieron los afectados.
Las cisternas que abastecen de agua a las comunidades de Guarenas están bajo las directrices de la gerencia de gestión urbana de la alcaldía de Plaza. «Ya tenemos bastante con los precios de la comida que cada día suben como para que también nos extorsionen con algo tan básico y tan necesario como el agua», sentenciaron.
En tal sentido, los afectados hicieron el llamado al alcalde Luis Carlos Figueroa para que investigue está situación y no permita que los conductores de las cisternas privadas, que ya son pagados por la alcaldía en cada viaje, cobren también al pueblo afectado por la escasez de agua por tuberías en casi todas las comunidades de Guarenas.
«Meta la lupa y revise las irregularidades que están ocurriendo con las cisternas, sobre todo con la de color azul. Ese señor es un grosero y está cobrando doblemente y nos dice que entre todos tenemos que pagar en dólares, con lo que está desangrando al pueblo», enfatizaron.
Vale destacar que los camiones cisternas participan en las jornadas de limpieza y desinfección que realiza la alcaldía en centros de salud y calles del municipio. A los tanques son agregados químicos como el hipoclorito de sodio y luego de culminar, vuelven a llenar, para abastecer de agua a las comunidades, sin previamente lavar los tanques. «Eso es peligroso, produce irritación en los ojos y afecciones de la piel, que ya se han presentado en varios vecinos. Hay que tener cuidado», concluyeron los afectados, quienes pidieron no ser identificados por remos a represalias.
Lidk Rodelo
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