La pandemia dejó hasta ahora al menos 286.000 muertos y contaminó a cuatro millones de personas en 195 países y territorios, según el último balance de AFP con fuentes oficiales
Varios países, incluida ahora Rusia, continuaban este martes con el lento retorno a la normalidad a pesar de la propagación del coronavirus y el temor a un rebrote, que llevó a España a imponer cuarentena a todos los que vengan del extranjero y a blindar sus fronteras.
España, uno de los países más impactados por la pandemia, con más de 26.000 muertos, empezó el lunes el proceso de desconfinamiento, que permite a más de la mitad de la población moverse en su provincia, con las notables excepciones de Madrid y Barcelona.
«La favorable evolución de la situación epidemiológica en nuestro país y el inicio de la desescalada hacen preciso reforzar las medidas de control», explicó el gobierno en un boletín oficial para justificar las nuevas medidas.
La primera obligará a partir del 15 de mayo a todo aquel que venga del extranjero a guardar cuarentena en casa durante 14 días, y la segunda restringe las llegadas por mar y aire desde los países del espacio europeo de libre circulación Schengen.
Rusia, que seguía confinada, empezó por su parte el martes a levantar parte de las restricciones, autorizando la apertura de peluquerías o parques en función de las capacidades sanitarias de cada región.
En Moscú, foco de la epidemia en Rusia con más de 121.000 cosos, prorrogó el confinamiento hasta el 31 de mayo.
El portavoz de Vladimir Putin, Dmitri Peskov, anunció el martes a las agencia de información que tiene coronavirus y está en el hospital.
Igual que en muchos países, en los transportes públicos de la capital rusa es obligatorio llevar mascarilla y guantes.
La pandemia dejó hasta ahora al menos 286.000 muertos y contaminó a cuatro millones de personas en 195 países y territorios, según el último balance de AFP con fuentes oficiales.
Después de Estados Unidos, con más de 80.000 muertos y 1,3 millones de contagios, los países más afectados son Reino Unido (32.000), Italia (casi 31.000 decesos), y España y Francia, ambos con más de 26.000 fallecidos.