En el nivel 56 de un rascacielos que sigue en construcción, trabajadores de la obra vivieron el sismo registrado la mañana de este lunes en la Ciudad de México y que tuvo epicentro en Oaxaca alcanzando una magnitud de 7.5.
Una de las personas que se encontraba a más de 200 metros de altura registró en video cómo se movían las varillas, mientras otros empleados lanzaban gritos nerviosos al sentir el temblor, al tiempo que algunos se sujetaban de las estructuras a su alcance.
En la grabación se escucha el ruido de las piezas metálicas que se agitan por el movimiento telúrico, un sonido hondo de las grúas torre se oye mientras los obreros voltean hacia arriba y observan la sacudida del armazón. Igual puede oírse el golpe de cables entre sí.
En un ruido bullicioso, los trabajadores comentan sobre su experiencia, cuando alguien grita: “¡relax, relax!”, en alusión a mantenerse relajados y no cundir al pánico.
En el celular con que se toma el video se cuela el sonido de una aplicación que notifica: “sismo detectado, intensidad leve”; y al mismo tiempo, se ve cómo los empleados viven el momento estrepitoso.
Otro de los presentes lanza preocupado: “se puede caer esa madre”, referente a las estructuras que están moviéndose.
Hace tres semanas, el 2 de junio, inició labores la empresa que desarrolla, entre otras obras, la torre residencial donde fue grabada la situación del sismo. Luego de que las autoridades sanitarias de México decretaran como actividad no esencial al ramo de la construcción, este sector detuvo sus operaciones, en el marco de reducir la movilidad por la emergencia de COVID-19.
Pero estos trabajos fueron reanudados desde el primero de junio, en la etapa catalogada como regreso a una “nueva normalidad”, es decir, la reactivación económica junto con la apertura del sector automotriz y minero.
De los siete niveles en que se divide el rascacielos, fue en el nivel de departamentos E donde los obreros experimentaron el temblor.
Según Pelli Clark Pelli Architects, firma que diseñó el inmueble, la torre residencial tendrá 68 pisos cuando sea terminada y medirá 267.3 metros de altura. Está previsto que los departamentos tengan acceso a “salas de proyección, jardín infantil, salones, un parque acuático y varias áreas de piscina, cancha de fútbol cubierta, salón de baile, spa y terrazas privadas; áticos de lujo con jardines interiores y acceso privado a un helipuerto”.
Se trata de una construcción con dos fachadas de vidrio y acero con curvas de forma elíptica; es uno de los últimos proyectos del reconocido arquitecto argentino César Pelli, quien falleció en julio del año pasado y fue autor de rascacielos notables a nivel mundial, como las Torres Petronas de Kuala Lumpur, en Malasia; la Torre Salesforce, en San Francisco, California; y la Torre Iberdrola, en Bilbao, España.
En México, César Pelli también firmó la Torre Libertad (St. Regis Hotel), así como el Complejo Residencial del Bosque.
Actualmente, la edificación más alta del país es la Torre Koi, localizada en San Pedro Garza García, Nuevo León y tiene una altura de 279.5 metros, con 67 plantas; pero se prevé que la construcción diseñada por el grupo del arquitecto argentino ocupe el segundo puesto de los más elevados y desbanque a Torre Reforma, que mide 246 metros de alto.
La construcción de este edificio empezó en 2008 y se espera sea concluido a mediados de 2021. Se ubica en la calle de Real de Mayorazgo 130, dentro del pueblo de Xoco, alcaldía Benito Juárez. Según un comunicado de la empresa, el conjunto de obras que realizan ha ofrecido empleo directo a poco más de 1,200 personas.
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