Una vacuna potencial contra el COVID-19 desarrollada en Rusia obtendrá la aprobación regulatoria local en la primera quincena de agosto y se administrará a los trabajadores de salud de primera línea poco después, dijo a Reuters una fuente cercana al asunto.
Un centro de investigación estatal en Moscú, el Instituto Gamaleya, completó los primeros ensayos en humanos de la vacuna basada en adenovirus este mes y espera iniciar los ensayos a gran escala en agosto.
La vacuna obtendrá la aprobación regulatoria de las autoridades en Rusia mientras continúa ese ensayo a gran escala, dijo la fuente, destacando la determinación de Moscú de ser el primer país del mundo en aprobar una fórmula de inmunización.
La velocidad a la que Rusia se está moviendo para implementar la vacuna ha llevado a algunos medios occidentales a cuestionarse si Moscú está anteponiendo el prestigio nacional por sobre los hechos científicos sólidos y la seguridad de las personas.
“La aprobación (regulatoria) será en las primeras dos semanas de agosto”, dijo la fuente, con estrechos vínculos a los científicos que desarrollan el producto. “El 10 de agosto es la fecha esperada, pero definitivamente será antes del 15 de agosto. Todos los resultados (de prueba) hasta ahora son muy positivos”.
La fuente agregó que los trabajadores de salud rusos que tratan a pacientes con COVID-19 tendrán la oportunidad de ofrecerse como voluntarios para inmunizarse poco después de que la vacuna reciba la aprobación regulatoria.
Por separado, la agencia de noticias rusa Interfax citó a “una fuente informada” diciendo que la vacuna recibiría la aprobación regulatoria entre el 10 y el 12 de agosto y se administraría a partir del 15 de agosto.
El servicio de prensa del Fondo de Inversión Directa de Rusia (RDIF), que coordina y financia los esfuerzos de desarrollo de vacunas de Rusia, eludió hacer comentarios, pero su jefe, Kirill Dmitriev, ha negado que la carrera científica para frenar la pandemia en Rusia comprometa la seguridad de las personas.