La tecnología que sea capaz de transformar agua salada de mar o agua salobre en agua potable limpia y segura posee el potencial de cambiar la vida a millones de personas en todo el mundo, lo que hace que muchos científicos se ocupen en proyectos para desarrollar precisamente eso.
Ahora, una nueva invención llevada a cabo por investigadores en Australia podría ser la más prometedora hasta el momento, dado que los expertos emplean filtros elaborados con compuestos de estructura metal-orgánicos (MOF) en combinación con luz solar para purificar el agua en solo 30 minutos, mediante un proceso que es más eficaz que las técnicas actuales.
El nuevo sistema es barato, estable, reutilizable y produce agua cumpliendo con los estándares de desalinización de la Organización Mundial de la Salud (OMS). Diariamente se pueden producir cerca de 139,5 litros (casi 37 galones) de agua potable por cada kilogramo de material MOF, según lo indican las pruebas preliminares.
Tras ser expuesto solo 4 minutos a la luz solar, el filtro libera por completo los iones de sal que absorbe el agua y queda listo nuevamente para su uso. El equipo detrás de la nueva invención asegura que ofrece varios adelantos sobre las técnicas de desalinización existentes.
Al respecto, esto explicó e EurekAlert! el ingeniero químico Huanting Wang de la Universidad de Monash:
Los procesos de desalinización térmica por evaporación consumen mucha energía, y otras tecnologías, como la ósmosis inversa, tienen varios inconvenientes, incluido el alto consumo de energía y el uso de productos químicos en la limpieza y decloración de membranas.
La luz solar es la fuente de energía más abundante y renovable en la Tierra. Nuestro desarrollo de un nuevo proceso de desalinización basado en adsorbentes mediante el uso de la luz solar para la regeneración proporciona una solución de desalinización sostenible desde el punto de vista energético y medioambiental.
El nuevo filtro fue denominado PSP-MIL-53, compuesto en parte de un material llamado MIL-53, conocido con anterioridad por el modo en que reacciona al agua y al dióxido de carbono.
Si bien no se trata de la primera investigación que propone el uso de una membrana MOF para purificar el agua de mar, el desarrollo de este nuevo filtro PSP-MIL-53 proporcionará a los investigadores muchas más alternativas para explorar.
Los MOF generalmente son materiales demasiado porosos: una sola cucharadita del material comprimido se puede usar para cubrir un área del tamaño de un campo de fútbol, y este novedoso método podría aplicarse en tuberías y otros sistemas de agua para producir agua limpia. Así lo señaló Wang:
La desalinización se ha utilizado para abordar la escasez de agua en todo el mundo. Debido a la disponibilidad de agua salobre y de mar, y debido a que los procesos de desalinización son confiables, el agua tratada puede integrarse dentro de los sistemas acuáticos existentes con riesgos mínimos para la salud.
Las nuevas soluciones no dan espera: según la OMS, aproximadamente 785 millones de personas en todo el planeta no tienen una fuente limpia de agua potable a una media hora a pie desde sus viviendas. A medida que empeora la crisis climática, el problema se hace mayor.
Puesto que el agua salina representa un 97% del agua de todo el planeta, esto se convierte en una gran solución por explotar para que, con soluciones como el PSP-MIL-53, se pueda hacer de esta agua un líquido adecuado y seguro para el consumo humano.
Aún no está claro que tan pronto están los científicos de lograr que sistema funcione y comience a operar, pero es muy alentador ver que se está ensayando otro enfoque, junto con los que usan luz ultravioleta, filtros de grafeno, luz solar e hidrogeles. Incluso hay quienes están buscando técnicas para producir agua “de la nada”. Sobre su trabajo, esto dijo Wang para finalizar su explicación:
Nuestro trabajo proporciona una nueva e interesante ruta para el diseño de materiales funcionales para utilizar energía solar para reducir la demanda de energía y mejorar la sostenibilidad de la desalinización del agua.
Estos MOF sensibles a la luz solar pueden potencialmente funcionalizarse aún más para obtener medios de extracción de minerales de baja energía y respetuosos con el medio ambiente para la minería sostenible y otras aplicaciones relacionadas.