Los funcionarios del cuerpo élite de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) que iniciaron la persecución de los antisociales recibieron órdenes superiores de abandonar la zona
Un funcionario de las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES), cuerpo élite de la Policía Nacional Bolivariana (PNB), resultó muerto y otros dos heridos, uno de ellos de gravedad, durante un intenso enfrentamiento registrado en la Cota 905 de Caracas la tarde de este martes 25 de agosto.
El efectivo asesinado fue identificado como el oficial jefe Edgar Jesús Palacios Veitía, mientras que los heridos fueron identificados como el oficial jefe Daniel Martínez, quien recibió un balazo en la pierna, y el oficial agregado Yusmar Ricardo Amaris, quien recibió un impacto de bala en la mejilla derecha.
Según versiones policiales, el enfrentamiento se inició cuando sujetos por identificar habrían intentado tomar la sede de la policía municipal de Caracas, ubicada en la sede del antiguo club de la Policía Metropolitana al final de la Cota 905.
La situación generó un intenso enfrentamiento que fue reportado por vecinos de El Paraíso a través de las redes sociales.
Tras el tiroteo inicial, los antisociales habrían huido hacia una zona boscosa ubicada detrás de la antigua sede policial y de allí hacia el sector Las Torres de la parroquia La Vega, hasta donde llegó la operación de búsqueda de los funcionarios que actuaron.
Al lugar acudieron comisiones de las FAES, la Policía Nacional Bolivariana (PNB) y el Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc).
Los funcionarios intentaron controlar el tiroteo y dar con el paradero de los delincuentes, pero todo el esfuerzo fue en vano, ya que, a mediados de la tarde, los efectivos policiales recibieron órdenes de abandonar el área, sin haber capturado a los presuntos asesinos de su compañero, lo que generó un profundo malestar en las filas policiales.
A través de audios subidos a las redes sociales, los funcionarios expresaron su pesar por la muerte del oficial Edgar Jesús Palacios y su malestar por la orden de abandonar la operación.