El Valle es una parroquia históricamente afectada por la basura. Aún cuando la ciudad ha estado en cuarentena, los vecinos se han visto en la necesidad de salir a protestar. En el sector San Andrés, ubicado cerca de la avenida principal, los habitantes trancaron la calle el pasado 3 de agosto con los mismos residuos que desbordaban la acera
El Valle, además de ser una de las parroquias con más número de casos de covid-19, también es una de las más afectadas por los servicios públicos. La basura y las aguas negras son dos problemas que no son atendidos por las empresas pertinentes. Los vecinos están cansados de tener en sus calles criaderos de bacterias y malos olores.
En las calles 15, 15 bis y 16 bis de Los Jardines de El Valle, la queja se repite desde hace más de un año: la basura se desborda de la acera. En el caso de la calle 15, el problema es aún más grave, porque un bote de aguas negras se une con los desechos. El mal olor es permanente, e incluso los habitantes de una casa que está al frente deben entrar pasando una lámina que pusieron como “puente”.
“Hidrocapital antes venía a hacer reparaciones que funcionaban por 15 días o un mes. Después se volvía a dañar el trabajo”, contó Nery Carmona, vecina de la zona y secretaria electoral del partido Un Nuevo Tiempo (UNT).
En el contexto de la pandemia en el país ha sido muy difícil que atiendan a los vecinos de El Valle. Según relataron, cuando piden atención a los organismos del Estado, especialmente a Hidrocapital, les dicen que no tienen personal, materiales, e incluso en una oportunidad les dijeron que no tenían un vehículo para trasladarse.
En esa misma calle también es común que se boten las aguas blancas. Los vecinos siempre reportan las fugas y les parece absurdo que mientras en su casa no tienen el servicio, en la calle se esté desperdiciando. Además, los vecinos han podido averiguar que las reparaciones de las fallas de aguas negras requieren un gasto inmenso porque aparentemente son tuberías que conectan con las cloacas de la calle 16.
En el caso de la basura, el descuido fue progresivo. Anteriormente, en Los Jardines de El Valle había varios botaderos en diferentes calles. Pero poco a poco los vecinos los fueron cerrando. En algunos pusieron santuarios o vírgenes y más nunca volvieron a botar desechos. Sin embargo, en la 15 quedó funcionando y ahí se deposita la basura de todo un sector. “Hay personas que botan la basura en la avenida y esa sí la recogen rápido”, comentó Carmona. Sin embargo, en la calle 15 el camión del aseo urbano puede pasar cada dos o tres días, que pudiera parecer “frecuente”, pero como se acumula tanta basura de tantos vecinos, entonces no lo es.
El problema de la basura en la calle 15 de Los Jardines de El Valle empeoró hace aproximadamente ocho meses, cuando los vecinos, en medio de la desesperación, decidieron quemar la basura en un container. Como se dañó, más nunca llevaron otro, por eso ahora los desechos están en el piso.
Carmona precisó que en este botadero se ven desechos de supermercados y hasta escombros. “No hay un control de lo que se bota”, afirmó. La Alcaldía de Caracas, a través de la empresa Supra-Caracas, que está encargada de prestar el servicio de aseo urbano en el Distrito Capital, tampoco les ha dado respuestas.
El Valle es una parroquia históricamente afectada por la basura. Aún cuando la ciudad ha estado en cuarentena, los vecinos han salido a protestar. En el sector San Andrés, ubicado cerca de la avenida principal, los habitantes trancaron la calle el 3 de agosto con los mismos residuos que desbordaban la acera. En esa zona, el aseo urbano no pasaba desde hace cinco meses.
Mariana Sofía García/Crónica.Uno