Familiares de las privadas de libertad en el Instituto Nacional de Orientación Femenina (INOF), en Los Teques, capital del estado Miranda, denunciaron que una interna está a punto de perder un seno, luego de esperar más de un año de atención médica para tratar una severa infección.
De acuerdo con la denuncia publicada por la oenegé Una Ventana a la Libertad, familiares de la interna señalaron que la directiva del penal negó el traslado a un centro hospitalario en reiteradas oportunidades. No fue sino hasta este miércoles que la directiva autorizó su traslado a una consulta médica.
“Comenzó a supurar en el seno que se enrojeció, pasaba noches con fiebre y dolor que la estaban haciendo llorar”, dijo una de sus familiares.
Médicos especialistas en el área de cirugía plástica señalaron que la dolencia de la privada de libertad obedecía a una infección de la mama, producto de la rotura de la prótesis que no fue atendida a tiempo: sin embargo, la médico cirujano que atendió en consulta solo recetó limpiar las heridas con vinagre sin indicar tratamiento.
“No es justo que esas mujeres, que están pagando algún error, no tengan ni medicinas ni servicio médico cuando, por muchos años, este centro tenía sus médicos y tratamientos, y no necesitaban ni traslado a los centros de salud”, destacó Raima Bastidas, abogado.
Enfermedades de la piel
Familiares de otras internas denunciaron que gran parte de las internas sufren de amibiasis y de enfermedades de la piel, producto del estado de insalubridad en el que habitan, porque no tienen servicio de agua con regularidad. “Muchas de las muchachas están enfermas y son incapaces de enviarlas al médico para que reciban un tratamiento”, agregó en la denuncia.
Los denunciantes aseveraron que las internas presentan vómitos y diarrea, producto de la amibiasis, pues “ni toman agua potable ni les entregan las que les damos”. “Cuando les llevamos productos de limpieza no se los entregan, porque la directiva dice que son donativos para la cárcel y nosotros hacemos el sacrificio de llevar esos implementos para que no vivan en una cochinera”, finalizó.
Pola Del Giudice
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