Los estudiantes, liderados por David Sosa, enumeraron las causas por las cuales no pueden reanudarse las clases en Venezuela como por ejemplo la deficiencia en la conexión a internet y los bajos salarios que perciben los profesores
El presidente de la Federación de Centros Universitarios de la Universidad Central de Venezuela (FCU-UCV), David Sosa, informó la mañana de este lunes 21 de septiembre a través de su cuenta en Twitter que alumnos de esa casa de estudios amanecieron en la sede del Ministerio de Educación, detrás del Banco Central de Venezuela (BCV), para denunciar la falta de condiciones en el país para poder dar clases.
Según la administración del gobierno del presidente Nicolás Maduro, se impartirán clases a distancia por la modalidad online y educación vía televisión, para lo cual habilitó al canal ViveTV para ese proceso. Los estudiantes liderados por Sosa advierten que la deficiencia en la distribución de los servicios públicos en el país, como agua, electricidad y la conectividad de internet, no permiten que se puedan dar clases de calidad, y denunciaron la situación de los docentes, cuyos exiguos sueldos los obligan a buscar otras formas para ganarse la vida y llevar el pan a la mesa de sus casas.
“Hoy le damos la cara al país y a la tiranía”, escribió acompañando su mensaje con un video en el que se puede ver a un grupo de estudiantes con una pancarta en el que hacen los señalamientos antes descritos con el mensaje que el ejecutivo “mató el legado de Andrés Bello”.
“Destruyeron la educación en general. Sin luz, agua, sueldos dignos, internet, ¿Cómo pretenden anunciar planes educativos fantasiosos? ¡El cara de tabla sigue haciendo de las suyas!”, manifestó Sosa.
Aseveró que los estudiantes universitarios continuarán elevando su voz para expresar las quejas de la comunidad universitaria, haciendo énfasis en que juntos “venceremos las sombras”.
Ya en reiteradas ocasiones, tanto docentes de la educación básica como los que imparten clases de varias universidades autónomas del país han denunciado que no existen condiciones idóneas para dar clases, alegando las graves fallas en la conectividad y la falta de recursos por parte de profesores y muchos alumnos para poder asistir a las lecciones, por lo que afirmaron que de esta forma la educación se volvía “excluyente”.
Asimismo, los agremiados a la Federación Venezolana de Maestros (FVM) aseguraron que no regresarían a las aulas hasta que les mejoraran los sueldos -una homologación con la canasta básica actual que ronda los $600- y se tomaran las medidas preventivas de bioseguridad para evitar la propagación del covid-19.
La rectora de la Universidad Central de Venezuela (UCV), Cecilia García Arocha, informó a principios de septiembre que remitió una misiva al Ministerio de Educación Universitaria para reiterar la posición de la institución de no retomar las clases.
El documento enviado al Ministerio recalca que las 11 facultades que conforman la UCV decidieron de forma unánime no comenzar las clases en la fecha pautada por el gobierno, después de sostener un encuentro de autoridades universitarias el pasado 28 de agosto.
El Presidente dijo el pasado 13 de septiembre que se hicieron consultas sobre el inicio de clases presenciales y resaltó que ha visto la experiencia del reinicio de clases en el mundo y cómo los casos de covid-19 han repuntado, por lo que indicó que tomaron en cuenta lo hecho en el país y se determinó que “no es favorable” impartir conocimientos de la forma tradicional. “No hay clases presenciales el 16 de septiembre y veremos si en enero regresamos. He decidido el no regreso presencial a clases y he pedido la fórmula al vicepresidente social, ministro de Educación, Aristóbulo Istúriz, y al ministro de Educación Universitaria, César Trompiz, que presenten fórmulas para el inicio del periodo nuevo con teleclases o por la modalidad online”, explicó Maduro en esa oportunidad.
Luego anunció que las escuelas y liceos del país abrirán sus puertas a partir del 5 de octubre durante las semanas de flexibilización de la cuarentena, para que los profesores tengan contacto con los representantes y alumnos, pero que aún así no se retomarán las clases presenciales, sino que consistirá en un sistema de consultas y comunicación presencial para complementar las clases a distancia.
En el caso de la educación universitaria, también previó el inicio de actividades para el pasado 16 de septiembre, cuando iniciaron los procesos de inscripción e incorporación a clases. Según el ministro de Educación Universitaria, César Trómpiz, se implementarían protocolos de bioseguridad y distanciamiento para que los alumnos acudan a sus instituciones a inscribirse.
Además, anunció que se aplicará un plan de asesorías a partir del 5 de octubre. Mediante un sistema de citas, los profesores podrán orientar a los estudiantes en el caso de las carreras que ameriten contenidos prácticos.