Familiares denuncian que no han podido saber de ellas desde que fueron encerradas en la celda denominada Sala de Reflexión, que es el nuevo nombre de “El Tigrito”, donde no tienen red de cloacas
En estado de salud critico están dos privadas de libertad en el Instituto Nacional de Orientación Femenina (INOF), ubicado en Los Teques, capital del estado Miranda, que están castigadas, desde hace tres meses, en un espacio denominado “sala de reflexión”, donde no tienen servicios básicos ni comida.
Familiares de Darly Ruiz y Gisela Origüen , señalaron a la ONG Una Ventana a la Libertad que ambas internas ya cumplieron su pena y no se les ha librado la boleta de excarcelación porque están castigadas y bajo encierro. “No han realizado Plan Cayapa en el penal para liberar a muchas de ellas que ya cumplieron su pena”, detallaron.
Las internas no han recibido comida porque el penal no la está suministrando y tampoco les reciben la que envían los familiares para llevársela a la sal de castigo, “Mientras eso pasa ellas están enfermas y con mucha necesidades, en riesgo de morir”, dijo la tía de Ruiz.
De acuerdo a lo señalado por las denunciantes, el área donde tienen a las dos reclusas está sin luz ni agua, tampoco tiene baño ni un espacio donde preparar alimentos. “Las condiciones son infrahumanas”, señalaron las familiares de Darly Ruiz y Gisela Origüen.
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