Un joven que reside en la popular zona de La Pastora, municipio Libertador de Caracas, relató cómo a su hermano «le desgraciaron la vida al sembrarle drogas» en un presunto procedimiento policial por parte de funcionarios de las Fuerzas de Acciones Especiales (FAES), cuerpo táctico de la Policía Nacional Bolivariana (PNB).
Este ciudadano narró, bajo la figura del anonimato, que un grupo de uniformados de las FAES le «sembraron» droga a su hermano, mientras que a él han intentado extorsionarlo o cobrarle «vacuna», dado que se dedica al comercio.
Todo ocurrió de manera repentina, recordó en su testimonio, cuando los efectivos adscritos al organismo se encontraban en un supuesto operativo de allanamiento en la zona. El hermano del joven se hallaba frente a la vivienda de un vecino y al ver que se acercaban los oficiales decidió entrar a la casa.
Tal acción provocó que los funcionarios ingresaran al inmueble donde se encontraba y amenazaron de muerte a los residentes para poder llevárselo. Cuando explicó que esa no era su lugar de residencia, entonces, los de la FAES se trasladaron hasta la vivienda de la abuela.
Allí, donde se encontraban algunos infantes, sobrinos del agredido, también ingresaron y sin mediar palabras se lo llevaron. Se conoció que,
al día siguiente, al acusado, quien al parecer no tenía problemas con la justicia, tenía un expediente levantado donde se señalaba que en la casa habían hallado drogas y dos radios transmisores, información que él desmiente.
Familiares del joven, buscando soluciones, llamaron a un primo que trabaja en el Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc) para que los ayudara con el caso y el oficial se comunicó con efectivos de las FAES y al parecer logró inhabilitar las actas. MDC