-14 noviembre, 2020
La mayoría relacionamos la ansiedad con la irritabilidad, la fatiga, el nerviosismo, el llanto fácil, la angustia, la falta de concentración o de sueño. Sin embargo, hay otros síntomas que pueden darnos pistas de que sufrimos ansiedad sin ser conscientes.
- Dolor muscular
Incluso en personas que parecen controlar los nervios, sin darse cuenta aprietan la mandíbula, tensan el cuello o los hombros, por ejemplo, entre otros músculos. Es una reacción natural del cuerpo que se «prepara» para asumir algo que percibe como una amenaza, por tanto esta tensión revela ansiedad. - Eres incapaz de relajarte
Pensar en la idea de estar un espacio de tiempo sin hacer nada, sentado en el sofá, paseando por la calle sin rumbo, leyendo o escuchando música te estresa. Si tener algún momento libre de objetivos te hace sentir mal posiblemente sufras algún grado de trastorno de ansiedad. - Bostezas mucho
El bostezo puede estar provocado por falta de sueño, pero si sientes que esta sensación te invade con frecuencia puede que esa falta de sueño sea debida a la ansiedad. - Sientes mareos con frecuencia
Un 15% de las personas que acude a Urgencias con mareos se debe a un trastorno de ansiedad. - Tienes el estómago delicado
Puede que algo te siente mal, que sufras intolerancia a algún alimento… o también que tengas ansiedad. Aquello de «se me ponen los nervios en el estómago» es un claro ejemplo. - ¿Comes muy rápido?
Lo más probable es que el culpable sea la ansiedad.
La ansiedad en cierta medida es buena porque es el arma que tiene tu cuerpo para defenderse ante un posible peligro.
El problema es cuando el peligro no existe como tal y vives en un estado de ansiedad constante que te afecta a tu calidad de vida y puede desencadenar incluso en una depresión.
¿Sufres ansiedad?
Por eso interpretar las señales que te envía tu cuerpo es muy importante para detectar el problema a tiempo y ponerle freno./SaberVivirTv