Miranda, 15 de diciembre de 2020 (nota de prensa).- Desde esta semana, el líder mirandino David Uzcátegui, da inicio al programa “Dar Vida a Miranda”, donde se entregará hipertensivos en las comunidades más vulnerables, para cubrir el tratamiento mensual para quienes más lo necesitan.
“Estamos convencidos que la solidaridad se practica en los momentos de más necesidad y ellos saben que cuentan con nosotros. A partir de este momento 1.000 miembros de nuestra querida juventud prolongada les entregaremos su tratamiento mensual de Losartan de manera gratuita. Les reitero, nuestro Programa “Dar Vida a Miranda” llegó para ayudar a miles de mirandinos de la tercera edad2, explicó Uzcátegui.
Como bien es conocido, el sistema de salud pública de Venezuela ha colapsado. Aunado a eso, la crisis económica, la mala alimentación, el alto costo de medicamentos y ahora la pandemia, han puesto en riesgo las vidas de un número incalculable de venezolanos. Todos estos factores han llevado a que los venezolanos sean más vulnerables, tanto a enfermedades preexistentes y por adquirir.
La realidad está presente allí, en cada recorrido: “Cuando vamos por distintas zonas de Miranda la gente nos cuentan los difícil que se les hace cuidar de su salud. Es casi imposible que puedan acudir a controles médicos y poder comprar medicinas. El poco poder adquisitivo está destinado para la comida. Nosotros no podíamos quedarnos de brazos cruzados y decidimos organizar Jornadas Integrales de Salud para cuidar de la familia mirandina. Y las estamos haciendo todos los días en un punto diferente del Estado. Y aunado a esto, ahora estamos implementando el programa para la tercera edad”, asevera el dirigente.
Los ancianos de aquí vienen arrastrando un desmejoramiento progresivo de sus condiciones de vida según lo comenta Uzcátegui, al aportar más detalles de la situación: “desnutrición, imposibilidad de costear sus medicinas, falta de acceso a la salud, migración de su hijos y familiares”. En un país que atraviesa una crisis sanitaria y humanitaria, nuestros abuelos, están lejos de vivir los años dorados prometidos.
¡Cuenta con nosotros. Estamos aquí para Dar Vida a Miranda”.
