El bitcóin (BTC) parece no tener freno en su camino de batir récords. En los últimos 13 meses, la criptomoneda, creada en 2009 por un programador anónimo conocido por el pseudónimo de Satoshi Nakamoto, alcanzó su máximo histórico al superar la barrera de los 50.000 dólares, lo que representa un aumento de más de 700% desde principios de 2020, cuando solo valía 7.300 dólares, casi un 15% de su valor al momento de escribir este artículo: 48,106,21 dólares.
La atención que ha despertado en la opinión pública el comportamiento alcista del bitcóin parece abrir la puerta a lo que expertos estiman como una transición entre el mundo fiduciario y el ecosistema de monedas virtuales que implique una mayor adopción, entre otros cripto activos, del BTC. En la actualidad existen más de 5.000 divisas online, pero el proyecto tecnológico de Nakamoto es el que lidera con amplia diferencia el sector.
La última vez que se produjo un crecimiento tan acelerado del bitcóin ocurrió en diciembre de 2017, cuando su valor subió 1.824% desde enero de ese año. En aquel entonces, rozó los 20.000 dólares, aunque su cotización no tardó en desplomarse al bajar más de 50% en apenas 15 días y así ubicarse por debajo de los 6.000 dólares, mientras que su capitalización de mercado pasó de 300.000 millones de dólares a 67.000 millones de dólares para finales de 2018.
“La subida de 2017 no respondía a ninguna explicación racional asociada al valor real. Era solo una burbuja especulativa, lo que se confirma con la agresiva corrección de 2018, pues de nuevo no hay unas causas objetivas que la expliquen”, decía en su momento Juan Pedro Gravel, socio de Estrategia Tecnológica de Deloitte.
Ahora, con una capitalización de mercado al 24 de febrero de este año de más de 900 millardos de dólares, según el portal especializado CoinMarketCap, el panorama parece ser distinto, o así lo piensa el economista Aaron Olmos, CEO de la firma Olmos Group Venezuela. “Lo que estamos viendo es una situación donde la inversión institucional, motivada por una ganancia rápida por especulación, está alentando que el precio del bitcóin crezca rápidamente”, dijo el experto.
Los nuevos usuarios han visto en el bitcóin un nuevo refugio de valor tan importante como para rivalizar con el oro ante un dólar en declive en el mundo debido a la pandemia de coronavirus. Entre las empresas privadas que se han sumado al rally del BTC se cuentan Square, propiedad del CEO de Twitter, Jack Dorsey; MassMutual; MicroStrategy y Tesla Motors, cuyo director general, el multimillonario Elon Musk, reportó el pasado 8 de febrero la compra de 1.500 millones dólares en bitcóin. “Esto ha hecho que el interés del mercado sea muy elevado y muchas personas estén deseosas de participar”, señaló Olmos.
El boom del BTC ha sido tan grande que el propio banco internacional con sede en Estados Unidos JP Morgan planteó a inversionistas la posibilidad de que diversifiquen el 1% de sus activos e inviertan en bitcóin. Desde la casa de inversión apuestan por un mayor crecimiento —y a ritmos vertiginosos— en los próximos meses y estiman que el bitcóin podría alcanzar los 146.000 dólares en el largo plazo a medida que la moneda digital sustituye al metal como activo de refugio. Otras instituciones financieras como Citibank se atreven a proyectar un máximo de más de 300.000 dólares.
La entidad bancaria añade que la moneda digital igual necesitaría quintuplicar nuevamente su valor para aproximarse al de las reservas privadas de oro en barras, monedas o fondos bursátiles.
Una de las razones de este interés radica en que, con la crisis generada por la pandemia, los bancos centrales han intervenido en los mercados financieros mediante la implementación de tipos de interés cero o negativas, la compra de deuda soberana y la impresión de moneda
Los inversores temen que esta política monetaria lleve a las economías a un escenario de inflación y devaluación de las divisas. Solo en el último año, el dinero que circula en los Estados Unidos aumentó un 25,8%, según los datos de la Reserva Federal.
“Otras empresas participan adquiriendo grandes sumas de bitcóins y quedándose en el tiempo, un poco apostando a largo plazo por temas de precios, pero también porque hay la creencia que los criptoactivos se van a convertir en los medios de pago del futuro”, afirmó Olmos.
Con la pérdida de alrededor de un 20% del valor de la criptodivisa en los últimos 10 días tras conquistar un nuevo récord, los expertos estiman que ahora vendrá un período previsible de corrección de precios, que no guarda relación con el fin de una burbuja financiera.