BARCELONA.-Datos duros, muy duros, para arrancar la Semana Mundial del Teatro tras un año de pandemia. El sector teatral barcelonés perdió durante el año 2020 36 millones de euros en ingresos debido a los largos cierres de las salas por el coronavirus y al menor aforo permitido cuando por fin pudieron abrir. Y tan solo en lo poco que llevamos del 2021 han perdido otros 14.
Nada menos que 50 millones de euros de ingresos perdidos en un año, casi dos millones de espectadores menos, unos datos devastadores para el mundo teatral, que ha exigido a las administraciones en el acto de presentación de la Semana del Teatro que «como sector esencial se nos proteja, se nos impulse y se nos coloque también en el centro del debate de la recuperación del pulso de la sociedad.
«La afectación ha sido grave, profunda y durísima», ha añadido Isabel Vidal, presidenta de Adetca, la asociación de empresas del sector, frente a la consellera Àngels Ponsa, el responsable de Cultura de la Diputació de Barcelona, Joan Carles García Cañizares, y el concejal de Industrias Creativas de Barcelona, Xavier Marcé, que han acudido a la Sala Barts del Paral·lel para las presentación de los múltiples descuentos y de los actos virtuales y presenciales que se celebrarán desde mañana y hasta el día 27 por la Semana Mundial del Teatro.
En 2020 se perdieron 1,4 millones de espectadores y 6.200 funciones
«Las cifras son ilustrativas del desastre: en 2020 se hicieron 487 espectáculos menos que el anterior, se perdieron más de 6.200 funciones, casi 1,4 millones de espectadores no pudieron ir al teatro y la pérdida económica fue de 36 millones de euros, sólo en Barcelona. A la vez hemos asistido a una caída de los ingresos y contrataciones en toda Catalunya por encima del 60%. Y eso no es comparable a nada. Y si miramos el 2021, año que llevamos abiertos al 50%, y lo comparamos con el mismo periodo del 2020 aún abierto al 100%, tenemos 437.000 espectadores menos y 14,5 millones de euros de pérdidas. No vamos nada bien», ha insistido Vidal.
Pero ha añadido que pese a eso el sector cree que es importantísimo que sigan abiertos para poder acelerar la recuperación «intentando no morir en el intento». «No dejaremos de celebrar ni una de nuestras fechas», ha advertido, y ha afirmado que por suerte «el teatro ha vuelto a erigirse en una actividad humana irrenunciable». En ese sentido ha remarcado que «del cierre inicial hemos pasado a ser vistos como actividades no sólo seguras sino necesarias» y haber seguido abiertos mientras otros países cerraban «nos ha convertido en referencia mundial».
