La sentencia de la Corte de Apelaciones de París en Francia publicada este jueves, establece que la empresa alemana certificadora alemana TUV Rheinland (TUV) el pago de una indemnización completa a todas las víctimas de los implantes mamarios franceses de la marca Poly Implant Prothèse (PIP).
El presidente de Anauco, Roberto León Paralli, expresó que la corte “nos lleva a un procedimiento donde las víctimas van ir recibiendo lo que los tribunales acordaron”.
Anauco representa a 5.000 venezolanas víctimas de estas prótesis ante la justicia francesa.
Desde hace más de dos años, Anauco ha podido pagar a más de 1.200 mujeres indemnizaciones provisionales de los tribunales como medida cautelar.
León indicó que fueron presentados en el juicio TUV-1, 600 casos de mujeres.
En el caso de los juicios TUV-2 y TUV-3 recibieron su indemnización preliminar según sentencia del 11 de febrero de 2021, que ratifica en apelación la sentencia de primera instancia y se están elevando los peritajes para que reciban la segunda parte.
Indicó que esperan por el TUV-4 que tienen sentencia el 11 de junio de este año, “allí esperamos que acuerden su indemnización preliminar”.
El presidente de Anauco explicó que va en curso un juicio TUV-5 “todavía está adhiriendo personas”.
Es por ello que hizo una llamado a todas las venezolanas que tengan estas prótesis que se pueden sumar a través de las redes de Anauco, donde serán orientadas para presentar el recurso en Francia. “En este caso van más 1.300 mujeres”.
-Las prótesis-
En el año 2010 fueron declaradas como de alto riesgo las prótesis PIP . Los implantes fueron fabricados con un gel no certificado para uso médico y que se ha probado que causa severos problemas al organismo cuando hay rotura de la prótesis y el líquido entra en contacto con el cuerpo.
León explicó que el caso llamó la atención, porque en Venezuela junto con Colombia se registraron la mayor cantidad de víctimas en el mundo.
En Venezuela, se estima que hay 40.000 víctimas, “esto se debe a que en algún momento a través de una distribución masiva y le fueron colocadas a muchas venezolanas en el país”.
Desde 2010, se han aplicado una cantidad de demandas. La empresa fabricante se declaró culpable y pagó su pena.
“Nos fuimos a una demanda en contra de la certificadora, que puso el sello de calidad, que es una empresa alemana, la más grande del mundo”.
Afirmó que “cuando una empresa certificadora pone un sello de calidad, está diciendo que el producto está cubierto y que es de alta calidad”.
Pero en este caso era un silicon no certificado y generó secuelas a miles de mujeres en el mundo.
Esta demanda contra la certificadora se inició hace muchos años, la primera fue declarada con lugar a favor de las víctimas, pero una corte de apelaciones revirtió la causa y exoneró a la TUV.
Eso hizo que el equipo de abogados acudiera a la máxima instancia el Tribunal Supremo de Francia, y ejercer el recursos de casación, el cual se ganó.
La Corte francesa ordenó a Corte de Apelaciones de París reponer el orden infringido en la sentencia y hacer una sentencia.
La sentencia que hizo la corte de París fue publicada hoy, con la contundencia, nuevamente reafirma la responsabilidad a la certificadora y ordena el pago inmediato a todas las afectadas, dijo León.
Con información de Noticias al día y a la hora.