La Autoridad de la Competencia de Francia impuso este martes a Google una multa de 500 millones de euros por no haber negociado de buena fe la retribución a los editores de prensa por el uso de sus contenidos noticiosos, como establece la legislación francesa.
Se estableció que la compañía debe presentar antes de dos meses una oferta de remuneración a los editores y a las agencias de noticias por el uso de sus contenidos. caso contrario la multa de 500 millones de euros podría incrementarse a 900.000 euros por cada día de retraso.
Esta decisión es de gran interés en la Unión Europea, debido a que Francia fue el primer país del bloque que trasladó a su legislación nacional, la directiva europea de 2019 sobre los derechos afines. El trasfondo de la disputa radica en que los medios de comunicación, se vieron afectados por la caída de las suscripciones y de la publicidad, y quieren que Google comparta con ellos parte del beneficio económico que reciben. Sin embargo, el resultado de la disputa en este país puede tener consecuencias en el resto de la UE.
Ante esta sanción Google manifestó su descontento, dónde aseguró que la empresa estaba a punto de ultimar un acuerdo global con AFP.
«Estamos muy decepcionados por esta decisión porque actuamos de buena fe durante todas las negociaciones. Esta multa no refleja los esfuerzos que se han realizado ni la realidad del uso de los contenidos de actualidad en nuestra plataforma», reaccionó un portavoz de Google, en un mensaje enviado a la agencia francesa de noticias AFP.
«Esta decisión se centra en las negociaciones que tuvieron lugar entre mayo y septiembre de 2020. Desde entonces, hemos seguido trabajando con los editores de prensa para lograr un entendimiento», según Google.
