En el informe de los equipos de WOLA y USIP “HALLAZGOS Y RECOMENDACIONES” sobre el proceso de negociación en Venezuela. Los autores organizaron entrevistas con figuras de la oposición y del gobierno de Maduro, como también a personal diplomático; que participaron en Oslo y Barbados en el 2019.
En su concepción visualizan el proceso de Negociación como uno, pero en opinión personal Aníbal Sánchez de darse el escenario de Mexico es un juego nuevo, aunque algunas fichas repitan. “Los equipos de negociación anteriores lograron avances en la discusión de problemas que se pensaban irresolubles” pero bajo la tesis de nada está resuelto, sino es la totalidad.
Cuando desde las otras partes se conocía el rechazo del sector de Maduro a la propuesta que renunciara para ceder a un “Consejo de Estado” y aún así discutieron unas condiciones electorales para un evento no previsto. ¿Que se podría reeditar? de acuerdo al mecanismo adoptado.
Se debe reconocer que los equipos de negociadores desarrollaron un nivel mínimo de confianza y entendimiento mutuo. Ambos se mantuvieron firmes en sus posiciones centrales, desarrollando una familiaridad con sus limitaciones, con críticas de sus contrapartes que en ocasiones pudieron imaginar otras soluciones.
En estos escenarios se enfrentan distintas posturas e incluso los resistentes a las concesiones. Del informe WOLA USIP destaca crítica a falta del apoyo de los Estados Unidos; lo que reducía la capacidad para generar la necesidad de negociar entre todos.
“Mientras las partes tenga alternativas a una solución negociada y recurran a ellas en las conversaciones se limitan las posibilidades” la oposición declaró fallidas las conversaciones al tiempo que afirmaban se necesitaba más presión contra el gobierno; y el oficialismo buscó la división para crear otro diálogo y aislar al grupo de Guaido.
“Parece que éxito de las negociaciones no fue necesariamente el objetivo primordial de las partes” ni en Oslo ni en Barbados. En la oposición por su parte mientras denuncia persecución a la disidencia o al pensar distinto; lo ponen ellos en práctica.
La falta de una visión política, más allá de la misma política de los Estados Unidos es percibido como una de las trabas en esa oportunidad. Para los entrevistados las divisiones entre el Consejo de Seguridad Nacional (NSC) de Trump y el Departamento de Estado complicaron su participación en el proceso.
El tener los Estados Unidos la llave para flexibilizar las sanciones es usado como un poder de veto; en el 2019 considerar un alivio de las sanciones sectoriales a cambio de nuevas elecciones con mejores condiciones pero con Maduro en su cargo, no lo concebían.
Estando anunciada otra serie de conversaciones o diálogo los investigadores de WOLA and USIP creen prudente dejar una serie de recomendaciones:
• La mesa de negociación debe ser reestructurada para incorporar un conjunto más amplio de actores e incluir un espacio para consultar con organizaciones de la sociedad civil, grupos de derechos humanos y víctimas.
• El Ministerio de Relaciones Exteriores de Noruega sigue siendo el actor mejor posicionado para facilitar futuras negociaciones.
• Publicar la agenda básica de cualquier negociación futura
e informando periódicamente al público sobre avances, de las conversaciones confidenciales.
• Ir a la reinstitucionalización en lugar soluciones inmediata a la crisis venezolana, podría tener más éxito. Incluyendo a los aspectos que garanticen la coexistencia política.
• Cualquier solución en sus opiniones va a requerir de elecciones libres y justas.
• Los Estados Unidos debe comprometerse a la negociación para asegurar su éxito.
• Se debe abandonar el enfoque de “todo o nada” el avance de la implementación en los puntos acordados puede conducir
a un alivio gradual.
• Los Actores deben tener cuidado de evitar expresar mensajes contradictorios.
• Los actores internacionales más allá de EE.UU. deben tener la oportunidad de jugar un papel de apoyo en las negociaciones, ya sea como garantes u observadores.
• Los actores internacionales deben trabajar para que las otras alternativas a la negociación sean poco atractivas.