Los oficiales de las fuerzas especiales que capturaron al presidente de Guinea, Alpha Condé, y proclamaron la disolución de las instituciones este domingo anunciaron un toque de queda en todo el país «hasta nuevo aviso».
En un comunicado que leyeron en televisión nacional, los militares también anunciaron la sustitución de los gobernadores y prefectos regionales por militares y convocaron a los ministros salientes y a los presidentes de las instituciones a una reunión el lunes a las 11.00 (07.00 en Bolivia) en Conakry.
«Cualquier negativa a presentarse será considerada como una rebelión» contra el comité instaurado por los golpistas para dirigir el país, dijo el grupo de oficiales.
«El toque de queda entra en vigor desde las 20.00 horas en todo el país hasta nuevo aviso», dijeron los militares. Sin embargo, pidieron a los funcionarios que fueran a trabajar el lunes.
Instaron a «todas las unidades (militares) del interior (del país) a mantener la calma y evitar los movimientos hacia Conakry».
El portal Guinee News informó a su vez que los militares emitieron la declaración en nombre del recién creado Comité Nacional de Agrupación y Desarrollo.
De acuerdo con el medio, los rebeldes llamaron a la población a regresar el lunes a sus trabajos y prometieron garantizar la seguridad de todos los ciudadanos civiles, así como de sus bienes.
En cuanto al presidente detenido, Alpha Condé, los golpistas aseguraron que su integridad física y moral «no está afectada».
El ministerio de Defensa guineano informó de un ataque contra la residencia presidencial pero aseguró que este fue repelido.