Una balacera la madrugada del viernes dejó al menos cinco muertos y seis personas heridas en una discoteca de un barrio popular situado en el centro histórico de la capital panameña, en un hecho que las autoridades atribuyeron a un enfrentamiento de pandillas.
Se trata del incidente más grave registrado en un lugar de diversión del que se tenga informes en el país centroamericano.
El escenario de los hechos se ubica en una zona histórica bien transitada y conocida también por ser un área roja, que está reactivando cada vez más sus actividades nocturnas a medida que se levantan las restricciones por la pandemia del coronavirus.
El jefe policial de la zona oeste de la capital, Ricaurte De La Espada, dijo a la prensa que detuvieron a dos hombres con un arma de fuego sospechosos de la balacera.
“El hecho se da por una guerra entre pandillas”, aseguró.
Si bien el problema de las pandillas en Panamá no es tan fuerte como en otras naciones centroamericanas, como Honduras y El Salvador, operan desde hace mucho tiempo bandas en barrios populares y marginales, que según las autoridades pelean por su territorio y están metidas en el narcotráfico.
Muchos de los homicidios, según los funcionarios de seguridad, se deben a venganzas por los llamados robos o “tumbe” de drogas.
En el pasado jefes pandilleros vivieron y operaron dentro del barrio de San Felipe, adonde está el llamado Casco Antiguo o sitio histórico, el mayor atractivo turístico de la capital y que colinda con Santa Ana, el lugar de la balacera.
El fiscal de homicidios Rafael Baloyes dijo más temprano que en el lugar de la balacera había cinco muertos, cuatro fueron sacados inicialmente y el otro, el supuesto atacante, fue retirado horas después del local de diversión, cuya seguridad está a cargo de agentes privados.
Agregó que según las investigaciones preliminares un hombre armado entró a la discoteca y disparó contra un grupo en particular, que respondió al ataque con armas de fuego. En algunos vídeos divulgados por la televisión panameña se escucha el estruendo de los disparos.
Una de las víctimas es Michael Ruiz, quien es un futbolista y estuvo en el equipo reserva de Alianza FC Panamá, reportaron varios medios.
A la entrada del local se podían ver en la mañana algunos zapatos regados.
De acuerdo con reportes de los medios en la discoteca se realizaba una fiesta pre halloween.
El Ministerio Público también informó el viernes del hallazgo de tres personas en un sector de las afueras de la capital y aunque el fiscal Baloyes dijo que ese hecho no tendría nexo con la balacera en la discoteca, otros jefes policiales no descartaron alguna vinculación.
Los tres cuerpos fueron encontrados maniatados y con una bolsa negra en sus cabezas, según las autoridades judiciales.