Fred Fugen y Vincent Cotte dos deportistas extremos, hicieron historia sobrevolando las majestuosas pirámides de Giza en Egipto, alcanzado una velocidades de hasta 250 kilómetros por hora.
Lo increíble es que no solo sobrevolaron las estructuras, sino que las bordearon, pues los trajes tenían la capacidad de elevarse nuevamente para luego realizar el descenso final en paracaídas.
No obstante, estas pirámides fueron construidas como criptas reales para los faraones desde el año 3000 a.C, con bloques de piedra revestidos de caliza, eran a la vista, grandes construcciones de color blanco.