La XXI Edición del Festival Latinoamericano de Música, máxima cita de la música contemporánea de la región, celebró el hecho de haber contado con la participación de 21 mujeres compositoras, un suceso sin precedentes en la historia venezolana y poco común en el mundo. Es el resultado de años de trabajo, esfuerzo continuo y excelencia musical, brindando espacios para las autoras y promoviendo su trabajo con las mejores orquestas y ensambles del país. También se debe a labor del Sistema Nacional de Orquestas, que desde su fundación, hace casi 47 años, ha buscado brindar igualdad de condiciones, al punto que casi la mitad de la matrícula actual de la institución es femenina, prueba de ello es la “Orquesta más Grande del Mundo” que obtuvo el Récord Guinness en noviembre de 2021, la cual estuvo conformada en un 54,14% por niñas, jóvenes y mujeres profesionales.
Además, vale resaltar que la Directora Ejecutiva del festival es la maestra Diana Arismendi, una de las pioneras y principales impulsoras de la música contemporánea en Venezuela, así como una de las docentes más destacadas y reconocidas en la formación de compositores en el país. Pero esta vez el Festival Latinoamericano de Música tuvo una curiosidad que lo hizo más interesante: fueron 21 mujeres, en la edición 21 del evento, celebrado en el año 2021, en el siglo XXI, es decir 5 veces el número 21. En esta edición la maestra Arismendi también participó con tres de sus obras: Cuarteto del Sur, Aves Mías y Tres Miniaturas.
El festival aún no ha terminado, todavía quedan dos conciertos sinfónicos que fueron reprogramados y que se llevarán a cabo entre enero y febrero, incluyendo el concierto en homenaje al maestro argentino del tango, Astor Piazzolla. También queda una presentación para obras de música de cámara donde participarán las compositoras Gabriela Ortiz (México), el estreno de la obra para percusión de Melissa Vargas Franco (Colombia) a cargo del reconocido Ensamble Catatumbo y la venezolana Marianela Arocha presentará su pieza Los Caminos de la Tierra. Las fechas y los horarios pronto serán anunciados en la página web oficial del festival www.festivallatinoamericanodemusica.org así como en sus redes sociales.
En total, en esta edición que está por terminar se presentaron 25 obras contemporáneas para música de cámara y orquestas sinfónicas, las cuáles han sido escritas por 21 compositoras, representando el 25% de todos los autores del festival, un número nunca antes visto en Venezuela. Otro punto relevante fue la presencia de jóvenes autores, lo que reviste gran importancia porque desde temprana edad se encuentran en su tierra natal con una vitrina para mostrar su trabajo, algo que hasta en los países desarrollados es difícil de conseguir.
“En esta XXI edición de manera progresiva y sin una intención previa de que así resultara, se fue incorporando en el repertorio a un grupo de compositoras, que poco a poco se fue haciendo más y más grande. Muchas de las obras de estas talentosas mujeres fueron propuestas por los intérpretes y con los recitales de artistas internacionales de una manera muy natural y positiva. En algún momento me detuve a concientizar lo que estaba pasando y comencé a hacer un conteo de cuántas éramos, llegando a ese coincidencial número 21 en la edición 21 del festival”, explicó la maestra Diana Arismendi.
Las compositoras que participaron son: las venezolanas Adina Izarra con la obra Cornucopia y Raquel Quiaro con Afrodita, así como Nelly Mele Lara, Beatriz Bilbao, Marianela Arocha, Diana Arismendi y Sylvia Constantinidis. De otras naciones Ángeles Herrera (Ecuador), Bertha Artero (Bolivia), Consuelo Diez Fernández (España), Errollyn Walle (Belice-Inglaterra), Gabriela Ortiz (México), Jocy de Oliveira (Brasil), Marisa López (España-Inglaterra), Marta Lambertini (Argentina), Maureen Reyes (Cuba-EEUU), Melisa Vargas (Colombia), Mónica O´Reilly (Cuba-Ecuador), Nora Ponte (Argentina-Puerto Rico), Sofía Gubaidulina (Rusia) y Tania Rubio (México).
Una de las obras que más llamó la atención en su estreno mundial, ha sido escrita justamente por una mujer e inspirada en el Coronavirus, se trata de ‘Covid Gridlocked Suite’ de la maestra Sylvia Constantinidis, quien además es una de las compositoras más premiadas, condecoradas, influyentes y con mayor experiencia del país. El Ensamble de Música Contemporánea Simón Bolívar, conducido por el maestro Alfredo Rugeles, fue el responsable de interpretar esta pieza que recibió críticas positivas. “Para mí fue un honor estrenar Covid Gridlocked Suite en el Festival Latinoamericano de Música, donde este año participan tantas compositoras talentosas”, destacó la oriunda del Edo. Nueva Esparta.
Mi obra es un estudio metafórico musical sobre la complejidad y multiplicidad de diversas ideas que recorren libremente el cerebro humano durante largos períodos de aislamiento. A medida que la emergencia del Covid imponía restricciones sociales, muchos se vieron obligados a superar este período en la más completa soledad. Personalmente, pasé más de 180 días sin ningún contacto humano. Sin embargo, es interesante observar cómo un cerebro hiperactivo puede llenar el vacío”, comentó la maestra Sylvia Constantinidis.
La Directora Ejecutiva del Festival, explicó la importancia de la representación de compositoras locales: “Participan por Venezuela en esta edición Beatriz Bilbao, Adina Izarra, Sylvia Constantinidis, Marianela Arocha, Nelly Mele Lara y mi persona. Casi todas somos de generaciones cercanas, podemos hacer una línea de tiempo interesante allí, con distintos estilos y escuelas. Tuvimos una representación venezolana muy digna y me honra estar en ese cuadro”.
“Tuvimos compositoras de varias latitudes y diversas generaciones. Dicho grupo va desde dos compositoras ya fallecidas, Nelly Mele Lara quien fue alumna de Vicente Emilio Sojo y la argentina Marta Lambertini, muy conocida en el medio musical de Argentina. Tenemos dos compositoras de primer orden fuera del ámbito hispano, la rusa Sofia Gubaidulina, una de las más importantes del mundo, con una carrera increíble y un cúmulo de obras maravillosa, a la cual admiro, sigo y estudió; también la brasileña Jocy de Oliveira, que además es una gran pianista, dedicada a la música electrónica y al video arte”, agregó Arismendi.