El Tribunal Supremo italiano confirmó este miércoles la condena a nueve años de prisión al exjugador brasileño Robson de Souza «Robinho» por violar a una joven de 23 años en una discoteca de Milán en 2013, cuando vestía la camiseta del Milan.
El Supremo italiano rechazó el recurso presentado por los abogados de Robinho, que defendieron al futbolista al asegurar que la chica tuvo relaciones sexuales voluntarias con el brasileño, según informan los medios italianos.
Para la sentencia definitiva fueron importantes algunas llamadas telefónicas interceptadas en las que Robinho aseguraba: «Me da risa porque no me interesa, la mujer estaba borracha, ni sabe lo que pasó», añaden las fuentes mencionadas.
La condena a Robinho había sido confirmada en 2020 por la Corte de Apelación de Milán, que consideró que el jugador, ex del Real Madrid y del Manchester City, entre otros, «humilló brutalmente» a la víctima y desvió voluntariamente las investigaciones.
Robinho jugaba en el Milan en 2013 y participó junto a un amigo, Riccardo Falco, en la violación de la muchacha de 23 años que estaba celebrando su cumpleaños en un conocido local milanés.
Robinho desmintió esas acusaciones en 2014, cuando trascendió la noticia de que Italia le investigaba por estos hechos.
En 2009, cuando jugaba en la Premier League, se supo que Robinho estaba investigado por la policía por una presunta violación en un club nocturno de Leeds, aunque fue posteriormente puesto en libertad bajo fianza, tras un interrogatorio.
El futbolista negó esas acusaciones.
La justicia italiana debería pedir a Brasil un permiso para la extradición del futbolista, que no reside en Italia, según los medios locales.
Con información de EFE