Este viernes la cifra de fallecidos por el aluvión aumento a 27, mismo que el lunes arrasó barrios del centro oeste de la capital ecuatoriana, tras un fuerte tormenta que descargó un volumen récord de lluvias, informó el Gobierno local. Asimismo, señaló que 41 heridos han sido ya dados de alta de casas de salud, en tanto que 14 permanecen hospitalizados, uno de ellos en estado crítico.
Hay dos personas reportadas como desaparecidas, según el informe de la Alcaldía. De acuerdo a sus estadísticas, 348 personas resultaron afectadas por la riada de agua, lodo, árboles y piedras que bajó desde el volcán Pichincha y se ensañó con zonas del centro-oeste de la capital.
Según el alcalde de Quito, Santiago Guarderas, el aluvión ocurrió por un «fenómeno natural extraordinario», que tuvo su origen en la intensa lluvia que cayó sobre la ciudad el lunes, con 75 milímetros de precipitaciones, cuando se preveía apenas dos milímetros. Ese volumen es el más alto registrado desde 2003.
Uno de los embalses construidos para captar las aguas lluvias en la montaña, con capacidad de 4.500 metros cúbicos, se desbordó porque se calcula una acumulación de 20.000 metros cúbicos, explicó el alcalde.
EFE