Los inmigrantes legales en EEUU ya no tendrán que enfrentarse a los obstáculos impuestos por el Gobierno del expresidente Donald Trump para obtener sus tarjetas de residencia permanente. La regla final de 2019 sobre la causa de inadmisibilidad de la carga pública fue anulada por la Administración Biden.
Esta norma era una dura política que afectaba a los inmigrantes de bajos ingresos que querían ajustar su estatus, así como a los extranjeros que solicitaban visados de inmigrante
La información fue anunciada esta semana por el Departamento de Seguridad Nacional.
Afirmó que la agencia ya no aplicará su Regla Final de Carga Pública de agosto de 2019.
La política que rige la determinación de que un inmigrante es inadmisible o inelegible para ajustar su estatus se remonta a décadas atrás, pero la Administración Trump cambió el estándar que el DHS utiliza al determinar que una persona es probable que se convierta en una carga pública.
La política que rige la determinación de que un inmigrante es inadmisible o inelegible para ajustar su estatus se remonta a décadas atrás.
Pero la Administración Trump cambió el estándar que el DHS utiliza al determinar que una persona es probable que se convierta en una carga pública.
Las tarjetas verdes sólo están disponibles para los inmigrantes que entran en una de estas categorías.
Por lo tanto, los inmigrantes que recibían prestaciones sociales como cupones de alimentos, asistencia para la vivienda, prestaciones en efectivo y servicios de Medicaid financiados por el gobierno federal, podían ser declarados por los adjudicadores del USCIS como no autosuficientes.
La actualización de la política de USCIS cambia el rumbo y señala que la agencia “no está considerando la recepción de Medicaid por parte de un solicitante (excepto para la institucionalización a largo plazo a expensas del gobierno), la vivienda pública o los beneficios del Programa de Asistencia Nutricional Suplementaria (SNAP) como parte de la determinación de inadmisibilidad de carga pública”.
Simultáneamente, el DHS también ha retirado una norma propuesta por la Administración anterior relativa a la declaración jurada de apoyo.
Esta obligaba a los patrocinadores estadounidenses de los inmigrantes a comprometerse a reembolsar al gobierno cualquier ayuda pública recibida por los familiares patrocinados.
“El DHS cerró el libro sobre la regla de la carga pública y está haciendo lo mismo con respecto a una regla propuesta con respecto a la declaración jurada de apoyo que habría puesto cargas indebidas a las familias estadounidenses que desean patrocinar a individuos que inmigran legalmente a los Estados Unidos”, dijo el secretario del DHS, Alejandro N. Mayorkas, en un comunicado de prensa.
El funcionario cubano-estadounidense subrayó que su departamento “está comprometido a implementar reformas que mejoren nuestro sistema de inmigración y reduzcan las barreras innecesarias a la inmigración legal.”
Con información de Miami Diario