En un escenario de lo que pareciera un conflicto bélico, el incesante rally alcista del petróleo está alcanzando cifras que no se veían desde el año 2014, lo que ha supuesto un duro revés para la economía mundial al tiempo que ha menguado, más si cabe, la previsión de crecimiento en tanto que la inflación continúa elevándose.
Los bancos centrales y la Reserva Federal de EEUU se encuentran en una situación alarmante en un momento en que la prioridad es la recuperación post pandemia. En estas circunstancias aumenta la presión de una inflación que atenaza a los consumidores, quienes padecen las consecuencias del incremento en los precios de transporte, alimentación y calefacción.
Este escenario podría ir a peor según los analistas que manifiestan que un alza en los precios del petróleo hasta los 100 dólares al finalizar el mes en curso, en comparación a los 70 dólares con los que terminó 2021, provocaría un aumento de la inflación de medio punto porcentual en EEUU y Europa para la segunda mitad de este año.
Además, manifiestan que si se diese el caso de un incremento en el precio del barril hasta los 150 dólares, la expansión mundial se estancaría y la escalada de la inflación alcanzaría el 7%, triplicando la tasa planteada por los responsables gubernamentales de la política monetaria.
Conflicto entre Rusia y Ucrania
El barril de Brent -el de referencia en Europa- se sitúa de hecho, en el momento de redactar este artículo, en más de 100 dólares. Este veloz aumento encuentra una de sus causas en la situación de alta tensión actual entre Rusia y Ucrania, puesto que se trata de un territorio clave en el tráfico del petróleo hacia Europa, a lo que hemos de añadir el papel de Moscú como tercer productor de petróleo a nivel mundial, quien además dirige junto a Arabia Saudí, el cártel de la OPEP+.
El hecho de que la embajada estadounidense se trasladase de Kiev a Lviv -Ucrania- como reacción ante el gran despliegue de las fuerzas armadas rusas en la frontera, se entendió como signo de un ataque inmediato y dejó notar su efecto impulsando aún más los precios del crudo al cierre de la sesión del pasado lunes 14 de febrero.
El mayor temor es que este conflicto obstaculice el suministro de petróleo, máxime cuando los inventarios de crudo se encuentran a un nivel tan bajo. Las noticias y situación del conflicto alimentan la volatilidad de los precios y, en caso de que la situación empeore, el barril superará fácilmente la frontera de los 100 dólares, en opinión de algunos analistas.
¿Es posible poner techo al rally del petróleo?
En medio de este complicado escenario la OPEP manifiesta que su capacidad de producción se encuentra cerca del límite. Pero parece que no todo está perdido.
Lo cierto es que el levantamiento de las sanciones sobre Irán podría dar la vuelta a la situación, pasando del déficit al superávit pues, en estos momentos, a causa de las sanciones, Irán produce muy por debajo de sus posibilidades. Y, en caso de anular ese bloqueo, los expertos aseguran que el crudo podría bajar su precio entre unos 10 o 15 dólares, atenuando la inflación y relajando a los bancos centrales y a los consumidores. Al parecer, ésta sería una opción más que probable según han manifestado altos cargos estadounidenses y europeos, quienes aseguran que las negociaciones siguen su rumbo y no se descarta reactivar el pacto nuclear del 2015.
Aun así, la realidad es que la cantidad real de petróleo que exporta Irán es un dato desconocido, ya que, aunque los datos oficiales cifran las exportaciones en unos 140.0000 barriles diarios, el volumen real se encontraría cercano a la cifra de 1,1 millones.
De hecho, China es uno de los países que extraoficialmente ha estado aprovisionándose con petróleo iraní, ignorando las sanciones estadounidenses y rellenando sus reservas estratégicas -el pasado mes de enero sin ir más lejos descargó en el puerto del sur de Zhanjiang una cantidad aproximada de cuatro millones de barriles, según afirman las fuentes- previamente a la liberación de sus reservas de emergencia acordada con EEUU, con el objetivo de disminuir los precios mundiales del crudo.
Nos encontramos en un momento clave para la economía mundial en el que el resultado de las negociaciones con Irán marcará la situación económica de los próximos meses.