Estados Unidos y la Unión Europea, junto a otros socios occidentales, acordaron este sábado sacar a «determinados» bancos rusos del sistema internacional Swift, una contundente medida económica en respuesta a la invasión militar de Ucrania por parte de Rusia.
«Nos comprometemos a asegurar que determinados bancos de Rusia son sacados del sistema de mensajes Swift. Esto garantizará que estos bancos quedan desconectados del sistema financiero internacional y alteran su capacidad para operar globalmente», señaló un comunicado conjunto difundido por la Casa Blanca, y también suscrito por Canadá y el Reino Unido.
La exclusión de las entidades rusas, cuyos nombres no precisa el comunicado, de la Sociedad de Telecomunicación Financiera Global Interbancaria (Swift, por sus siglas en inglés) se produce tras intensas consultas en los últimos días entre Estados Unidos y los países europeos, algunos de los cuales habían planteado sus dudas al respecto.
El sistema de transacciones Swift es la base del sistema financiero global y lo usan 11.000 bancos en 200 países o territorios para poder hacer transferencias.
Asimismo, los aliados occidentales pactaron «imponer medidas restrictivas» contra el Banco Central de Rusia con el objetivo de «prevenir el uso de sus reservas internacionales para socavar el impacto» de las sanciones.