El fiscal general de la administración de Nicolás Maduro, Tarek William Saab, informó este miércoles que su despecho iniciará la investigación sobre la denuncia de un «enfrentamiento» entre indígenas yanomamis y funcionarios militares en Puerto Ayacucho, estado Amazonas, en el sur del país.
«Designados en Amazonas el fiscal 91 nacional en materia indigenista y la fiscal 4 de derechos humanos, para investigar conjuntamente con expertos del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc), denuncia sobre enfrentamiento entre indígenas yanomamis y funcionarios militares», señaló el fiscal en su cuenta de Twitter.
Saab explicó que ambos fiscales se trasladaron a la comunidad de Parima B en el municipio Alto Orinoco del estado Amazonas, junto a una comisión policial y de «expertos», para hacer las experticias y determinar las responsabilidades.
La ONG de Venezuela Fundaredes denunció el martes la muerte de cuatro indígenas yanomamis en Puerto Ayacucho, estado Amazonas, producto de un «enfrentamiento» que tuvo lugar el pasado domingo, 20 de marzo, entre miembros de esa etnia y militares de la Fuerza Aérea en Parima B.
«Instamos al Estado venezolano a investigar el enfrentamiento del pasado 20 de marzo entre indígenas yanomanis y militares de la Fuerza Aérea en Parima B, municipio Alto Orinoco del estado Amazonas, donde fallecieron cuatro indígenas y otros resultaron heridos», dijo Fundaredes en Twitter.
La ONG detalló que entre los fallecidos se encuentran «Donaldo y Jonatan, de 22 años, Cariban de 30 (años) y Martina de 45 años» y aseguró que «este hecho violento inició cuando el capitán de la comunidad indígena pidió la devolución de un router de internet y los militares se negaron a la entrega».
La oposición venezolana, encabezada por Juan Guaidó, también denunció los hechos a través de un comunicado de prensa en el que citó la denuncia hecha en Twitter por la exdiputada opositora Mauligmer Baloa, quien informó que murieron «cuatro indígenas yanomamis y otros heridos se encuentran en el hospital José Gregorio Hernández, de Puerto Ayacucho».
Baloa confirmó que el enfrentamiento con los militares se inició porque no fue devuelto a la comunidad un equipo electrónico que habían prestado a los funcionarios para tener acceso a internet.
«Fuentes señalan que los hermanos indígenas prestaron el equipo para que todos pudieran comunicarse con una antena que pertenece a los funcionarios de la Base Fronteriza, aseguró la opositora.
Con información de EFE