Los hechos del 11 de abril representaron un quiebre en la historia política del país, con el resurgimiento de la figura de Hugo Chávez en un escenario que cambió a favor de la mayoría. Así lo dio a conocer Miguel Mora, presidente del Concejo Municipal del Municipio Plaza, quien recordó que la explosión popular tomó las calles de Guarenas y de ahí a todo el país y el continente. “La década de los 90 representó una agudización en la conflictividad de la crisis política en el país, entre eso la insurrección militar del 4F, y 27N y el nacimiento de un nuevo actor en la esfera política que irrumpió con la forma total de hacer política y lo político en la nación, como lo fue Hugo Chávez”, acotó Mora. “Habiendo recibido un golpe en el hígado el 27F del 89, (los políticos del país) no podían permitir que se materializara el Plan de Chávez de hacer una nación soberana y que sus riquezas fueran distribuidas equitativamente, lo que se inició desde su victoria en 1998, cuando llamó a Constituyente e, inmediatamente, siguió en la creación e implementación de un conjunto de leyes habilitantes que -en mi opinión-, llevaron al desespero de los sectores dominantes de la derecha venezolana, bajo su tutelaje del gobierno del norte”, recalcó. “Con la nueva Constitución de la República Bolivariana de Venezuela, y las leyes habilitantes, especialmente la de tierra, comenzó una verdadera reforma agraria, dándole tierra a quien la trabajaba, los sin tierras de la vida ya tenían tierra para vivir y trabajarla”, dijo. “Por eso y mucho más, la burguesía tenía que cobrarle al pueblo y a Chávez lo que insolentemente se habían atrevido a hacer y se produjeron hechos importantes en su contra, pero desde las bases populares, nuevamente es el pueblo, así como el 27F del 89, sin dirección política, aunque esta vez con un ideario bolivariano, una Constitución y un líder, insurgió con los poderes creadores del pueblo”, recordó. “Para mi fue un acto hermoso, de amor, donde el amado rescata a su amor cueste lo que cueste, y así fue, el pueblo resistió el 11, fue derrotado unas horas, el 12 se replegó, se repensó, se reorganizó y tomó una decisión de vida: luchar y vencer, y es por eso que el 13, desde las catacumbas, los barrios, las montañas, las costas, el llano, como dice la canción ‘bajaron’ con su bandera y su conciencia, armados con su Constitución, soldados y pueblo enlazados en un acto de amor, a rescatar al comandante Chávez, y su revolución”. Para el edil, el pueblo siempre es el protagonista de su historia. “El pueblo indígena resistió en 1492, se alzó hecho cimarrón, cruzó los andes con Bolívar, llegó hasta el alto Perú con Sucre, se paró frme junto al general Castro ante el bloqueo inglés en 1902, se le reveló a Gómez, derrocó a Pérez Jiménez, se fue a las guerrillas en los años 60, 70, 80, insurgió el 27F del 89, se encontró con Chávez y el ‘por ahora’, tomó las armas el 27N, se encontró con Chávez en las calles y se convirtió en huracán y ganó las elecciones del 98 y en el 2002 resistió, se replegó, se reorganizó y el 13 de abril luchó y venció”. Ardua lucha “El camino de Chávez no está desviado, desviado estarán otros. Chávez nos dejó una hoja de ruta clara, en cuyo andar siempre van a existir piedras que se atraviesan”, explicó el edil Miguel Mora. “Para mí son obstáculos en este camino. El pueblo no va a dejar de transitar el camino de Hugo Chávez. Somos la corriente histórica y popular que vamos a resistir como el 11. Si nos llegara un 12, nos replegaríamos, nos reencontraríamos, nos repensaríamos, y lucharíamos una vez más, sí como el 13 de abril que resurgimos desde las cenizas”.