El magnate cierra la operación para hacerse con el 100% de la empresa tras un fin de semana de negociaciones.
Twitter ha anunciado este lunes un acuerdo con Elon Musk, consejero delegado de Tesla y el hombre más rico del mundo, para comprar la totalidad de la red social en una operación valorada en 44.000 millones de dólares (unos 41.000 millones de euros). El magnate hizo pública la oferta hace 11 días, después de que se difundiera que había adquirido una primera participación del 9,2% en la empresa, que tras esta transacción dejará de cotizar en Bolsa.
Las negociaciones para cerrar un acuerdo se han desarrollado durante el fin de semana. El empresario pagará 54,20 dólares por acción para hacerse con una red social fundada hace 16 años y que se ha convertido en este tiempo en un punto clave para el debate sobre temas políticos y sociales, y también sobre los límites de la libertad de expresión. A pocas horas del anuncio, que se esperaba desde esta mañana y estaba pendiente de una reunión del Consejo de Administración de Twitter, las acciones de la red social ya subían un 5%. La cotización se suspendió poco antes del anuncio del acuerdo.
La operación supone un triunfo para Musk, de 50 años, que ha logrado torcer la mano a Twitter, que había enviado en un principio señales inequívocas de que no aceptaría la oferta. El ritual de cortejo y rechazo entre la empresa y el multimillonario, que cultiva su fama de hombre impredecible y excéntrico, se ha podido seguir como un vibrante culebrón tecnológico-bursátil.
Según Reuters, las discusiones sobre el acuerdo, que la semana pasada parecían «inciertas», se aceleraron durante este fin de semana después de que el director general de Tesla y SpaceX «atrajera» a los accionistas de Twitter con los detalles financieros de su oferta.
«Espero que hasta mis peores críticos permanezcan en Twitter, porque eso es lo que significa la libertad de expresión», escribió el magnate en un tuit.
El pasado 4 de abril el empresario adquirió una participación pasiva del 9,2 % de Twitter, convirtiéndose así en el accionista principal de dicha red social, lo que provocó que el valor de las acciones de la compañía aumentara un 26 % en las operaciones previas a la comercialización.
A mediados de abril, el director general de Tesla y SpaceX ofreció comprar el 100 % de Twitter pagando en efectivo 54,20 dólares por acción, lo que, según Bloomberg, podría clasificarse como una de las adquisiciones más grandes de Internet.
Durante una charla TED concedida esa misma jornada, el magnate precisó que mejorar la confianza pública en la plataforma es «extremadamente importante para el futuro de la civilización», por lo que sugirió que los algoritmos de Twitter se hagan públicos, por ejemplo, en Github, para que los usuarios entiendan cómo funciona la red.
Asimismo, condenó que «se promocionen o degraden tuits de manera misteriosa», argumentando que es algo potencialmente «peligroso». En este sentido, se mostró a favor de la libertad de expresión y de que Twitter acate las leyes de EE.UU.
Un día después, la junta directiva de la red social adoptó la denominada estrategia de la ‘píldora venenosa’, con la que busca impedir que el director general de Tesla y SpaceX incremente su participación en Twitter en más de un 15 %.