Los familiares lo identificaron como Jesús Ismeldo Millán, quien según el estudio de antropólogos y odontólogos forenses de la morgue de Bello Monte, murió de un golpe con objeto contundente en la cabeza.
Según el portal Crímenes sin castigo, Los restos de Millán, fueron descubiertos por cuidadores de la casa, quienes en días previos atendieron al llamado de la familia Millán, para realizar trabajos de remodelación y ofrecer la propiedad en venta. Al lugar llegaron comisiones de la subdelegación El Llanito de la policía judicial, mientras que el organismo forense usó a la brigada canina para rastrear el lugar.