Uno de los grandes cambios que llegó con el Gobierno del presidente de la República, Gustavo Petro, fue el anuncio del restablecimiento de las relaciones diplomáticas con Venezuela, una de las más importantes en la historia de ambos territorios, por su cercanía e intercambio en diferentes áreas.
La decisión tiene diversas implicaciones, esto teniendo en cuenta que el Gobierno del expresidente Iván Duque Márquez rompió en su totalidad las relaciones con el vecino país, que está al mando del presidente Nicolás Maduro.
Aunque ambos líderes han manifestado su interés de restablecer las relaciones, la decisión de los Estados tiene que evaluarse en diversos aspectos: en lo político, económico, comercial, entre otros.
Para el analista político Pedro Viveros, ambos Gobiernos deben comenzar a disponer diversas mesas técnicas en diferentes áreas, para que las relaciones en todos los aspectos comiencen a definirse y completarse.
“Corresponde hacerlo con una metodología diplomática, para que se puedan alcanzar relaciones que perduren. Debe haber una conversación de alto nivel entre equipos de trabajo técnico, las Cancillerías de ambos países para definir una ruta de restablecimiento, habría que ajustar unos temas que ya estaban funcionando”, explicó Viveros.
El analista internacional Ronald Rodríguez, coincidió con Viveros asegurando que ambos países deben definir personas en concreto, que se encarguen de dicho restablecimiento que principalmente comenzaría en la frontera, zona más cercana y beneficiosa para los ciudadanos de ambos países.
“Ni en Colombia ni en Venezuela hay unas personas responsables de la relación con el otro país, se requiere alguien que logre construir consensos, más que un embajador es una persona que pueda interactuar con los diferentes actores, en la comercial, en la económica, los cuerpos de seguridad respecto a las preocupaciones y temas que deben ser planteados”, expresó Rodríguez.
Según datos de la Cancillería, con el restablecimiento de las relaciones diplomáticas se tendría que definir el embajador de Colombia en Venezuela y los 15 consulados correspondientes a: Barinas, Barquisimeto, Caracas, El Amparo, Machiques, Maracaibo, Mérida, Puerto Ayacucho, Puerto de la Cruz, Puerto Ordaz, San Antonio de Táchira, San Carlos del Zulia, San Cristóbal, San Fernando Atabapo, Valencia.
Ambos analistas coincidieron en asegurar que, aunque se restablecerían las relaciones en los Gobiernos de Petro y Maduro, se deben consolidar para que no se rompan más, esto sin importar quiénes serán los presidentes de ambos países en los próximos años.
“Lo más importante es restablecer las relaciones entre los Estados, para que no importe quien sea el presidente de Colombia o Venezuela de acá en adelante, nunca se vuelvan a romper las relaciones entre los Estados. Crear los vínculos de tal manera que haya legislación para proteger las relaciones bilaterales”, expresó Viveros.
Por su parte, Rodríguez aseguró: “Vamos a tener que interactuar con un régimen no democrático, de tener un cuerpo diplomático de primera línea, es un camino largo, no creo que se haga en dos meses, se podría ir casi todo el mandato de Gustavo Petro. Hay que evitar la personalización”.
Con información de La Opinión