El especialista que ha revolucionado la manera cómo nos percibimos, mediante la psicoestética, nos trae un valioso y conmovedor libro, en el que nos demuestra que todos podemos alcanzar el potencial que deseemos desarrollar
Helayne Pérez Bethelmy / hperez@diariolavoz.net
En entrevista exclusiva para nuestro medio, contamos con la grata presencia del Dr. José Canelón, psicólogo especialista en PsicoEstética y autor del libro «La Imagen es Poder», el cual está cargado de una propuesta motivadora que nos impulsa al autoconocimiento, autoestima, y por ende al éxito.
El doctor nos obsequia valiosas herramientas que nos muestran lo sencillo que es decidir ser felices, tener paz en el alma y conocer nuestras limitaciones, brindando a su vez un mensaje que va más allá de cultivar la imagen física, ya que toma en cuenta que reconocer nuestra esencia y nuestro ser, “nos hará ver con mucha claridad las cosas y cumplir de manera más fácil las metas y objetivos que nos propongamos”, acotó el invitado.
Un libro todo terreno
“A mi juicio, la imagen es poder, desde el punto de vista de lo que puede transmitir a las personas, es decir, no se trata de vestir bien, impecable, es lo que yo como persona pueda estimular en los demás a través de todos los elementos, mensajes que pueda proyectar, desde mi personalidad, desde mi ser, esencia, emociones, afectos; el lenguaje corporal y verbal”, puntualizó Canelón.
¿Cuál es la base de la psicoestética?
Para el Doctor Canelón, “todos esos elementos que integran la imagen son los que le dan sustento a la armonía estética que se pueda mostrar, cuando generamos un impacto visual en las demás personas.
“La imagen es poder”
El entrevistado explicó la relevancia que tiene en nuestras vidas el simple hecho de poseer una imagen poderosa. “Poder de ser una persona influyente, un referente, un modelo social, tiene que ver más con eso que con la manera de vestir, con la forma de utilizar los elementos que la moda me puede proveer “, Indicó Canelón.
Amor por la psicoestética
Canelón mostró mucha sensibilidad al relatar sus inicios en el mundo de la psicoestética. Desde detractores hasta quienes le apoyaron, todos han aprendido a ver a través de su aguda mirada, los beneficios comprobables de adoptar una posición de poder, partiendo desde la perspectiva visual que tenemos de nosotros mismos. “Cuando me gradúo como psicólogo, la coordinadora de la carrera, la doctora María Luisa Alvarado, que en paz descanse, me dice que tenía que especializarme en PsicoEstética, y yo le pregunté: a que se refería el término, y me respondió ‘investiga en internet, allí vas a encontrar un maravilloso mundo”. El padre de esta disciplina hermosa se llama Carlos Muñoz Espinal, él era psicólogo, sociólogo, también grafólogo y fue consultor de imagen de muchísimas personalidades del mundo deportivo, social, empresarial, cultural, expresó.
Más allá de la estética
Canelón nos comentó que tras sus investigaciones, comenzó a darse cuenta que la imagen no sólo tenía que ver con aquello que vestíamos, o complementábamos con el cuerpo, sino que se relacionaba con muchos elementos, que le dan el verdadero sentido a cómo somos percibidos por las demás personas y el entorno en el que nos desarrollamos. “El aporte de la PsicoEstética pasa a ser el hecho de que nosotros debemos adecuarnos a cada rol social que desempeñamos en cada uno de nuestros entornos, en lo personal y profesional, porque cada uno de esos roles tiene tres códigos que son irrenunciables, como son el código de comportamiento, de vestimenta y de verbalización; es decir, el código de que todas las cosas se deben decir y hacer en su momento, todo tiene su tiempo”, acotó.
Finalmente, es importante acotar la calidez que emana de este singular hombre. Su visión ante una definición que ha sido encasillada en lo vanal, nos ha demostrado que es mucho más que eso. Para desarrollarla cabalmente, Canelón recomienda encontrar el balance perfecto entre imagen, comportamiento y entorno social,para que podamos ser percibidos de manera positiva y alcancemos el éxito. “Con vestirse bien y mostrarse bien nunca es suficiente, ser y parecer son dos cosas que deben ir de la mano”, puntualizó.