Un acuario gigante estalló el viernes en un prestigioso hotel de Berlín, enviando un torrente de agua y 1.500 peces tropicales al vestíbulo, y causando dos heridos leves.
El AquaDom, una estructura de unos catorce metros de altura, se presenta en su página web como «el acuario cilíndrico más grande del mundo».
Sus paredes de vidrio se rompieron a las 5H50 (4H50 GMT), según la policía y los bomberos.
La gigantesca pecera, que contenía un millón de litros de agua, estaba ubicada en el vestíbulo del hotel Radisson Blu, en la turística zona de la catedral y de la Isla de los Museos.
Además de causar «daños marinos increíbles», el incidente se saldó con dos heridos leves, que fueron trasladados al hospital.
El acuario estaba equipado con un ascensor de cristal que permitía a los visitantes observar la vida marina desde el interior.
El hotel fue evacuado gradualmente. Hasta ese momento, los cerca de 300 huéspedes que tenía el establecimiento no se habían podido hacer una idea de la magnitud de los daños.
Unos periodistas de la AFP observaron por la mañana que había objetos rotos en el suelo helado, frente a la entrada abierta del establecimiento.
La alcaldesa de Berlín, Franziska Giffey, afirmó que, si el incidente se hubiera producido una hora más tarde, probablemente hubiera causado «terribles pérdidas humanas».
Los 1.500 peces que vivían en el acuario no pudieron ser salvados, detalló.
Todavía se desconocen las causas del incidente. El acuario no fue víctima de una simple grieta sino que «estalló», subrayó el portavoz de los bomberos.
El acuario Sea Life, situado muy cerca, «permanecerá cerrado hasta nuevo aviso», indicó Marcel Kloos, director regional de su casa matriz, Merlin Entertainments.
El museo de la RDA, ubicado cerca del lugar y construido en el sótano, quedó parcialmente inundado y probablemente permanecerá cerrado hasta finales de febrero, indicó su director, Gordon Godin, al diario regional Berliner Kurier, añadiendo que aproximadamente el «30% de la superficie de exposición quedó destruida».