En exclusiva para el Diario La Voz, el director del Hospital Ricardo Baquero González, el Dr. Julio Linares, nos concedió una emotiva entrevista en la que demostró cómo se obran milagros cuando se suman voluntades
Helayne Pérez Bethelmy / hperez@diariolavoz.net
Fotografía: Jaime Manrique
El doctor Julio Linares, nos permitió un recorrido el día de ayer por las instalaciones de uno de los hospitales más emblemáticos del oeste caraqueño. Ubicado en la popular Parroquia Sucre, el Periférico de Catia, atiende más de 1000 pacientes al mes, una cifra más baja que el resto de los centros hospitalarios de la Gran Caracas. Este bajo índice de atención a los enfermos, obedece a que, durante los últimos años, sus instalaciones han sufrido pérdidas considerables, tanto en su estructura como en el personal que debería estar al 100% en sus respectivos servicios.
Sin embargo, gracias a la gestión emprendida por el Dr. Linares en apenas dos meses, pudimos constatar que se están materializando fuertes y contundentes muestras de mejoramiento de ese centro médico, para garantizar la salud y el bienestar de aquellos que necesiten de su atención.
Una crisis asistencial generalizada
Al igual que el reportaje que publicamos hace un par de semanas acerca del Hospital Domingo Luciani en Petare, el Ricardo Baquero González, “Pepo”, tiene la fortuna de contar con una nueva directiva que también se encuentra en pleno proceso de su rescate y rehabilitación. No solo de sus instalaciones e infraestructura, sino del prestigio del que fuera en algún momento “el principal centro quirúrgico de la ciudad de Caracas, con más del 40% de las intervenciones, hasta hace un poco más de 10 años”, afirmó el Dr. Linares.
El galeno, agradeció que nuestra intención era mostrar el lado positivo de todo el trabajo por el cual están luchando. “Hemos estado trabajando muy duro desde hace dos meses y ya los resultados se está viendo. Estamos restaurando en su totalidad cinco quirófanos para que, dentro de los próximos meses, sean atendidos todos los pacientes que requieran un servicio de salud de calidad”, aseguró el ginecobstetra.
Un hospital que estaba en ruinas
El Dr. Julio Linares, destacó que cuando era subdirector, ya se veían las grandes carencias de las que padecía el hospital. Las instalaciones, como pudimos apreciar, están en muy mal estado, a excepción de todo el techo, el cual fue impermeabilizado y pudimos verificar que se hizo un trabajo de calidad. El doctor aseguró que comenzaron “primero por eliminar todas las filtraciones para proseguir ya con la restauración de las paredes de todo el recinto hospitalario”.
De igual manera, los insumos y equipos médicos, están siendo progresivamente sustituidos por nuevos, según lo afirmado por el director. “No ha sido una tarea fácil. Hemos tenido muchas personas que no han creído en este proyecto, pero, así como existen estas personas, también están quienes nos apoyan y tienen fe en el nuevo equipo que está dando el 100% para rescatar al Ricardo Baquero González “Pepo”. Sé que lograremos alcanzar el éxito en la meta establecida, ya que nuestra visión y misión, es tener el mejor hospital de toda Caracas”, afirmó Linares.
Sí hay grandes fallas
El Dr. Linares. también mencionó algunos problemas que se han suscitado como en todos los centros hospitalarios. “Los pacientes no tienen por qué traer medicamentos, cuando aquí los hay. Hemos tomado medidas y hablado con las personas, quienes muy gentil y educadamente, vienen a presentar su denuncia ante estas irregularidades. Inmediatamente, tomamos los correctivos necesarios y acabamos con esa situación. Repito, aquí no se piden los insumos con los que sí contamos en el hospital”, aclaró el médico.
Un equipo a toda prueba
El director nos pidió que reconociéramos la labor de médicos, enfermeras, personal administrativo y de servicios generales, quienes, a pesar de todas las adversidades, dan el todo por el todo para atender a los más necesitados. Enfatizó que toda su gestión “fuese algo absolutamente estéril, si no contara con el personal y el equipo, quienes luchan por trabajar día a día con el corazón. Todos vienen a trabajar con la mejor disposición, porque nosotros somos quienes vamos a demostrar que cuando las cosas se quieren lograr, se alcanzan. Tengo el mejor equipo y confío en ellos al 100%, y por ello estoy muy agradecido. No lo pudiera hacer sin ellos”.
Finalmente, el Dr. Julio Linares, agradeció al Diario La Voz, por mostrar los aspectos positivos del centro hospitalario que dirige y por exponer el lado humano que, muchas veces, algunos medios olvidan mencionar.