La Corte de Apelación de Londres (CAL) se pronunciará en las próximas semanas sobre el caso del oro venezolano depositado en el Banco de Inglaterra y cuya autoridad se disputan la administración de Nicolás Maduro y la gestión del líder opositor Juan Guaidó.
Los tres jueces del tribunal londinense han señalado que comunicarán su decisión en una fecha indeterminada y primero en privado a las dos partes: por un lado la junta del Banco Central de Venezuela (BCV) designada por Maduro y por el otro la junta paralela nombrada por la oposición.
La Corte debe determinar si acepta o rechaza un dictamen emitido el 29 de julio por la jueza Sara Cockerill de la división comercial del Tribunal Superior, que daba a la junta «ad hoc» del BCV nombrada por Guaidó, con acceso a las reservas valoradas en más de mil 800 millones de dólares.
Por su parte, el abogado de la junta de Guaidó, Andrew Fulton, rechazó ese argumento y sostiene que el dictamen de Cockerill no se ve afectado en absoluto por los acontecimientos políticos en Venezuela e instó a los magistrados a ceñirse a la coyuntura que hubo cuando fue emitido.
Ademas, Richard Lissack, abogado del oficialismo, adujo que si Londres ya no reconoce a Guaidó, la doctrina de una sola vez ya no impediría reconocer las sentencias anulatorias de su junta emitidas en 2019 por el Supremo caraqueño.