Un exembajador estadounidense dijo el jueves que se declarará culpable de acusaciones de ser agente de Cuba durante décadas, lo que pondría fin inesperadamente rápido a un caso que según la fiscalía fue una de las traiciones más osadas en la historia del servicio diplomático estadounidense.
Manuel Rocha, de 73 años, le dijo a un juez federal que admitirá cargos federales de conspirar para ser agente de un gobierno extranjero, acusaciones que podrían dejarlo tras las rejas durante años. Su abogado indicó que la fiscalía ha acordado una sentencia, pero ésta no fue divulgada en el tribunal el jueves.
El fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, calificó el caso de Rocha como «una de las infiltraciones de mayor alcance y más duraderas en el gobierno de Estados Unidos por parte de un agente extranjero».
Rocha también fue Consejero Político Adjunto de la Embajada de Estados Unidos en la Ciudad de México.