La VIII cumbre de la Comunidad de Estados Latinoamericanos y Caribeños (Celac) arrancó este viernes en la isla caribeña de San Vicente y las Granadinas, y tiene como trasfondo la paz regional y otros temas como la crisis climática y la financiación para el desarrollo.En el evento participan varios presidentes latinoamericanos, entre los que destacan los mandatarios de Brasil, Luiz Inácio Lula Da Silva; Venezuela, Nicolás Maduro; Colombia, Gustavo Petro; Bolivia, Luis Arce; Cuba, Miguel Díaz-Canel, y la hondureña Xiomara Castro.La rivalidad política de la región se trasladó al bloque, a cuya reunión no asistieron los mandatarios derechistas Javier Milei (Argentina), Daniel Noboa (Ecuador), Santiago Peña (Paraguay) o Luis Lacalle Pou (Uruguay).»La no injerencia en los asuntos internos»En la ceremonia de celebración, Castro, que asumió la presidencia pro témpore del organismo, aseguró que «la paz en América Latina y el Caribe debe estar basada en la no injerencia en los asuntos internos de otros países».Por su parte, el presidente cubano aseveró que para avanzar en la integración de América Latina y el Caribe es esencial preservar la paz. «En un mundo convulsionado por la violencia y las guerras, la paz no es solo un derecho legítimo de todos los pueblos y de cada ser humano, es una condición fundamental para el disfrute de todos los derechos humanos, en particular, el derecho supremo a la vida», dijo.Díaz-Canel aseguró que los verdaderos enemigos son «el hambre, la pobreza, el cambio climático, el analfabetismo, las enfermedades, el agotamientos de los recursos naturales».»Genocidio en Gaza»Por su parte, Petro acusó a Francia, Alemania, EE.UU. y la Unión Europea (UE) de apoyar un genocidio contra la población palestina en Gaza.»Alemania apoya el genocidio, y Francia, y la Unión Europea, y el Reno Unido, y sobre todo los EE.UU. de Norteamérica en su versión demócrata, apoyan tirar bombas sobre la gente, porque están haciendo una demostración sobre la humanidad toda», denunció Petro.Asimismo, el mandatario agregó que para que la Celac pueda plantearse realmente como zona de paz, más allá de declararla, primero debe «evaluar un poco cuáles son los peligros que esa paz en América Latina y el Caribe tienen» y uno «inmenso», dijo, es el mismo que amenaza a todo el planeta en la actualidad: la crisis climática generada por el modelo capitalista.Además, la cumbre contó con la presencia del secretario general de la ONU, António Guterres, que pidió una reforma del sistema financiero internacional para apoyar a los países en desarrollo y trabajar para alcanzar la justicia climática.»El sistema financiero global está fracasando en proveer financiación asequible a largo plazo a los países en necesidad y en ofrecer una red de seguridad financiera», afirmó.
Fuente El Universal