El reciente cambio de dueños del canal venezolano Globovisión causó que la oposición del país pierda una tribuna que mantuvo durante el mandato del fallecido presidente Hugo Chávez, que estuvo en el poder desde 1999 hasta marzo pasado con el medio de comunicación privado como contradictor permanente.
El pasado día 13 Globovisión pasó de manos de su fundador, Guillermo Zuloaga, a los empresarios Juan Domingo Cordero, Raúl Gorrín y Gustavo Perdomo, quienes este jueves indicaron que se comprometieron con el Gobierno de Nicolás Maduro a que el canal será “muy sensato” a la hora de “transmitir” la información.
“Nos han pedido que seamos muy sensatos en la transmisión de la noticia y eso es lo que vamos a hacer”, dijo Cordero tras sostener un encuentro con el presidente en el palacio presidencial de Miraflores.
Un día después de esa reunión, el líder de la oposición venezolana y excandidato a la Presidencia Henrique Capriles comentó en un evento de masas que encabezó en el estado occidental de Lara que se había enterado de que su discurso no sería transmitido por Globovisión.
“Me dijeron que esta asamblea ya no iba a ser transmitida por Globovisión, bueno yo agradezco a todos los que trabajan en Globovisión (…) y si nosotros no tenemos una ventanita para hablar tenemos la ventana más importante que tiene cada uno de ustedes que es radio bemba (de boca en boca)”, dijo Capriles.