El dirigente de Primero Justicia Gremial, Ingeniero Víctor Barrios, manifestó su preocupación sobre el mal estado que se encuentran los elevados de Caracas, así como la vialidad en el resto del país, que presentan un deterioro acentuado, debido a la falta de mantenimiento que deberían tener estas estructuras y no se le han dado con la frecuencia requerida ni se hace hincapié en la calidad de los materiales ni una inspección adecuada de los trabajos.
Aseguró Barrios que en los actuales momentos “el elevado de Los Ruices posee una separación de 10 centímetros y fallas en sus defensas, haciendo que los conductores pasen por pura necesidad, pero con una sensación de miedo a volcarse”. Señaló también la falta de señalización adecuada “para que los conductores no titubeen al manejar por la falta de visión tanto en las horas diurnas como nocturnas”.
De igual forma, el dirigente resaltó la “ausencia de las gomas de neopreno entre las juntas de construcción y dilatación en dicho elevado, pudiendo traer serias consecuencias al ser tomados por los motorizados, dados sus llantas delgadas”.
“Los desniveles son importantes entre secciones del mismo elevado, formando literales peldaños que podrían acarrear accidentes viales de consideración con los vehículos que transitan en sentido contrario o con los mismos vehículos en igual sentido. Algunas láminas tapa polvos laterales, se encuentran desprendidas casi que por completo, solo pendiendo de algunos tornillos de sujeción y representando un riesgo a las personas que transitan por debajo” aseguró.
En el año 2010, fue el último momento que se tuvo conocimiento “de algún mantenimiento a no todos, sino a algunos elevados, cosa que se debería hacer de forma periódica con un plan serio de mantenimiento así que nuestro llamado de atención como ingenieros que somos y por sobre todo como ciudadanos que hacemos vida y transitamos por ellos”.
Resaltó que “lo más grave es la capa de rodamiento en algunas zonas es inexistente y las láminas de hierro se asoman plateadas sin nada de arena o capa de rodamiento, cosa que atenta contra el buen control del carro, por el peligro de deslizamiento y probable choque”.
Finalizó haciéndole un llamado al Gobierno Nacional y a los organismos nacionales en materia de vialidad, “si no son capaces de hacer el mantenimiento a la vialidad en el país, devuelvan a las alcaldías y gobernaciones estas competencias, para darle el correspondiente y oportuno mantenimiento a todas estas estructuras, que si bien deberían ser sustituidas por estructuras de orden definitivas y no provisionales como fueron diseñadas allá por los años setentas, pero ya que se ha hecho una costumbre convivir con ellas, por su carácter y composición”.
