Tras la ala de fuertes rumores que invadieron las redes sociales, el animador y actor socialista, desmintió con un comunicado de prensa, la salida del Kino Táchira. Muerde Aquí transcribe de forma fidedigna, lo expuesto por el artista de Venevisiòn.
“Es esta una campaña mal intencionada con la que buscan desprestigiarme. Quiero dejar bien claro que ni me han botado ni he renunciado a la conducción de Kino Táchira. Mi esposa y yo seguimos como animadores de este juego maravilloso que ha ayudado a millones de familias en nuestro país. Hasta que Dios lo permita estaremos domingo a domingo llevando amor y felicidad a los hogares venezolanos. Aprovecho para hacer un llamado a todas esas personas que, por pensar diferente a mí, buscan hacerme daño; señores dejemos a un lado el odio, seamos mejores cada día, paz, amor, tolerancia. Juntos podemos hacer de Venezuela, el mejor país del mundo”, Winston Vallenilla.
Renovó con Venevisiòn
El carismático artista también aseguró que su labor dentro del canal de La Colina sigue y que en ningún momento se ha planteado la posibilidad de su salida de “La Guerra de los Sexos” y mucho menos de la planta televisiva donde hace pocos meses acaba de renovar contrato.
Desde que el otrora artista de la desaparecida RCTV, fijó posición política, declarándose afecto al actual gobierno, la polémica ha acompañado su vida personal y profesional. Se dice que Vellenilla, al declararse oficialista, sumó unos cuantos ceros a su cuenta bancaria y aseguró su permanencia en Venevisiòn, convirtiéndose en una figura “intocable” Pero como la moneda tiene dos caras, a Winston no se le puede objetar su calidad profesional y se le debe respetar su postura. Cada quien es dueño y responsable de sus actos y debemos ser tolerantes ante las decisiones y opiniones de los demás, así tengamos posturas distintas. La política ha dividido no solo al país, si no al gremio artístico y es lamentable que se sigan suscitando de bando y bando hechos de intolerancia. Vivimos en un país democrático, aunque muchas veces dudemos de ello, por los hechos que aquí suceden y esto lo digo porque los mismos derechos que tiene Winston Vallenilla, los debemos tener todos. El ser socialista u opositor no debe marcar diferencias, ni menos privilegios. Todos somos venezolanos y allí parte el eje del conflicto. No se puede exigir respeto, ni mucho menos tolerancia, cuando se cae en un discurso ofensivo, excluyente y prepotente y Winston debe tener eso en claro. Analizar sus actos y su discurso no le vendría mal y a todos entender que tenemos pensamientos, ética y valores diferentes tampoco. Podemos vivir en armonía, sin necesidad de confrontaciones innecesarias ¿Cómo se logra eso? ¡Sencillo! Aceptando a cada quien como es y viviendo la vida sumando y no restando. El tiempo pone todo en su lugar y mientras tanto, debemos trabajar todos en función de esa suma y no de más divisiones, odios y conflictos. En conclusión: Venezuela es de todos y los mismos derechos de Winston, los debe tener Norkys Batista y usted amiga y amigo lector.
Debemos ser solidarios el uno, con el otro y entender que los políticos son servidores públicos y que es su obligación y deber, velar por todos los venezolanos. Cuando entendamos y exijamos eso, estemos en el bando que estemos, podremos tener un mejor país. El egoísmo trae miserias humanas, no sigamos hundiendo a Venezuela en el fango. El respeto se gana y la repulsión también. @diegokapeky
Diego Kapeky
Twitter: @diegokapeky
