El dirigente opositor Henrique Capriles consideró este jueves «inaceptable» la reacción del gobierno en Caracas, que molesto por su visita a Colombia dijo que reevaluará el apoyo que brinda al proceso de paz con la guerrilla FARC.
«La paz nunca puede ser objeto de chantaje, o se quiere la paz y se trabaja por la paz o no se quiere la paz. No puede haber puntos intermedios», dijo Capriles a la colombiana Blu radio.
Las declaraciones de Capriles responden a una advertencia del canciller venezolano Elías Jaua, quien la noche del miércoles anunció que revisará el acompañamiento de Venezuela en el proceso de paz de Colombia.
«Es muy difícil trabajar por la paz de un pueblo hermano cuando desde las más altas instituciones de ese pueblo hermano se estimula y alienta la desestabilización en Venezuela», dijo Jaua, al cuestionar la reunión privada que el pesidente Juan Manuel Santos concedió a Capriles el miércoles por la mañana en Bogotá.
Venezuela, junto con Chile, participa como país acompañante de los diálogos entre el gobierno de Santos y las FARC, mientras que Noruega y Cuba actúan como garantes de ese proceso.
Para Capriles, es «inaceptable tratar de condicionar a Colombia y decirle a quién puede recibir y a quién no».
«Son patadas de perdedores, porque a quienes se robaron las elecciones solamente les queda eso: insultar, descalificar, tratar de evitar que la voz de millones de venezolanos se escuche en Colombia, como se va a escuchar en otros países de América Latina», añadió Capriles, que ha impugnado las presidenciales del pasado 14 de abril, en las que perdió frente al chavista Nicolás Maduro por una diferencia de 1,49 puntos porcentuales.
Después de su reunión con Santos, Capriles fue recibido el miércoles por las directivas del Congreso colombiano. Este jueves tiene previsto un encuentro con la comunidad venezolana y una rueda de prensa.
AFP