No quedó claro de inmediato si el fallo sobre el panel constitucional, de 100 miembros, dejará sin efecto la carta magna que redactó y que fue aprobada con una baja participación de electores: 35%
EL CAIRO. El máximo tribunal de Egipto falló el domingo que tanto la legislatura de la nación como una comisión constitucional fueron elegidos ilegalmente, asestando así un duro golpe a la base jurídica de los islamistas en el poder.
La sentencia del Tribunal Supremo Constitucional agregó que la cámara alta, la única actualmente en sesión, no será disuelta hasta que se elija a los nuevos integrantes de la cámara baja a finales de este año o principios de 2014. La legislatura está dominada por los islamistas.
El panel constitucional ya fue disuelto después de que terminó la carta magna del país.
El fallo profundiza la inestabilidad política que se ha apoderado de Egipto desde el derrocamiento del presidente Hosni Mubarak hace más de dos años.
El mismo tribunal supremo decidió disolver la cámara baja en junio pasado, una decisión que llevó a que la cámara alta —el Consejo de la Shura, normalmente sin facultades reales de poder— se convirtiera en una cámara para la creación de leyes.
El Consejo de la Shura, siempre ridiculizado como nada más que una tertulia, fue elegido el año pasado por cerca de 7% del electorado.
No quedó claro de inmediato si el fallo sobre el panel constitucional, de 100 miembros, dejará sin efecto la carta magna que redactó. La Constitución fue aprobada en un referéndum nacional en diciembre, pero con una participación relativamente baja del electorado, de alrededor del 35%.
Sin embargo, incluso si la Constitución queda intacta, la sentencia pondrá en duda la legitimidad de la controvertida carta magna, que se abrió paso gracias a los aliados del presidente islamista Mohamed Morsi durante una sesión legislativa que duró toda una noche a finales del año pasado.
Los críticos dicen que esa Carta restringe las libertades y da voz y voto a los clérigos sobre la legislación nacional. Los islamistas que redactaron el documento insisten en que Egipto nunca ha tenido nada mejor.
La oficina de Morsi emitió un comunicado breve, en un intento aparente de eliminar cualquier confusión sobre el fallo.
Hizo hincapié en que todas las instituciones del Estado deben respetar la Constitución, que el Consejo de la Shura seguirá funcionando como órgano legislativo de la nación y que el presidente se asegurará de que todos los poderes del Estado estén en funcionamiento pleno.
Es probable que el fallo del domingo prolongue la transición política polarizante que siguió tras el derrocamiento de Mubarak.
Los grupos políticos rivales no sólo están en desacuerdo sobre las políticas y la dirección de la nación en el futuro, sino en la legitimidad de las instituciones básicas de gobierno.