Las posibilidades de sufrir una afección grave dependen del momento del parto, ya que cuanto más prematuro es el bebé más cuidados hay que tener
Los bebés prematuros preocupan mucho a sus padres ya que están en riesgo de tener problemas de salud al recién nacer y también más tarde en la vida. Una muy buena noticia es que al llegar a la adolescencia la tasa de patologías crónicas de los chicos nacidos con muy bajo peso no es diferente a la habitual, concluyó una nueva investigación.
Pero los autores de la Universidad Case Western Reserve (Estados Unidos) aclararon que el asma y la obesidad son dos situaciones particulares que conviene tener en cuenta para evitar complicaciones en los chicos que nacieron con bajo peso.
• BEBÉS MUY PEQUEÑOS
Los nacimientos prematuros ocurren en alrededor del 8% al 10% de los embarazos. Ocurren cuando el parto tiene lugar antes de la semana 37 de gestación. Como el bebé sale anticipadamente del útero, algunos órganos pueden no estar bien formados y eso genera un problema de salud.
Las posibilidades de sufrir una afección grave dependen del momento del parto, ya que cuanto más prematuro es el bebé más cuidados hay que tener. En muchos casos es necesario internar a los chicos en una unidad de cuidados intensivos de neonatología por un tiempo, hasta que estén más fuertes y sanos.
• SALUD A LARGO PLAZO
Los autores trabajaron con bebés que nacieron con muy bajo peso. Explicaron que en edad escolar estos chicos suelen tener más problemas crónicos de salud que los chicos que tuvieron un peso normal, pero su investigación apuntó a dilucidar si esta situación se prolonga en la adolescencia.
Y, para alegría de los padres y los pequeños, resulta que entre los 8 y 14 años de edad las afecciones crónicas de salud no son distintos para los que fueron bebés de peso normal o muy bajo.
La obesidad sí marcó una diferencia ya que la tasa de esta patología subió del 12% a los 8 años al 19% a los 14, mientras que en los chicos de peso normal la tasa se mantuvo estable. El asma marcó otra particularidad, ya que los chicos de 8 a 14 años que nacieron prematuramente la sufren con una tasa del 23% en ambas edades mientras que esta cifra sube del 8% al 17% en los jóvenes con un peso normal al nacer.
Los autores concluyeron que sus resultados son importantes para los chicos que nacieron con bajo peso, ya que esta condición “puede ser considerada un factor de riesgo para patologías crónicas que requieren un cuidado más cercano durante la adolescencia. Los chicos con bajo peso al nacer que sufren asma u obesidad deberían recibir intervenciones como programas para la prevención del tabaco y el fomento del ejercicio con el fin de reducir las consecuencias de estas condiciones”.
• Fuente: NeoMundo