Las inyecciones usadas para contrarrestar la influenza están agotadas desde hace varios días, además en el país existe un déficit de medicamentos de 43%, según afirmó el director de Salud del municipio Sucre del estado Miranda, Julio Castro
Tras haber transcurrido varias semanas del inicio del brote de la influenza humana AH1N1 este año, se ha elevado el número a 1.138 casos confirmados como positivos, siendo 414 diagnosticados los últimos días y 28 fallecidos, según boletín del Ministerio de Salud. A esto se le suma la falta de vacuna contra el virus, la cual se agotó el pasado miércoles 5 de junio.
Así lo informó Julio Castro, director de Salud del municipio Sucre y coordinador por la Mesa de la Unidad para el monitoreo de la gripe, indicando que la estrategia implementada por el Gobierno Nacional es vacunar como prioridad a los pacientes con alto riesgo, lo cuales son embarazadas, niños menores de 5 años, adultos mayores de 65 años y personas con enfermedades crónicas.
“Sólo este grupo suma 4.5 millones de personas y el Ejecutivo informó que se la han administrado a dos millones en dos años, es decir que falta más de la mitad, entonces no imagino si se fueran trazado como meta vacunar a toda la población”, dijo.
Además, resaltó que el virus se comporta como brote, estacionalidad o epidemia, considerando que la influenza se encuentra actualmente en el último comportamiento, pues Venezuela pasó el rango habitual entre las infecciones respiratorias agudas (IRA). “La mayoría de las muestras que se han tomado desde la semana 18 son AH1N1, es decir calculamos que van entre 40 a 50 casos de fallecidos no reportados”.
Cultura de vacunación
Por otra parte, el doctor recomendó rediseñar una campaña de información a la población, ya que Venezuela es uno de los países de Latinoamérica en donde no existe cultura de vacunación ni herramientas de prevención.
“Ya enfrentando una epidemia, la vacuna no es una estrategia muy efectiva para controlarla, porque si se aplica la dosis a los 29 millones de habitantes, no parará la influenza, ya que la inyección para hacer efecto requiere entre 3 a 4 semanas”, señaló. Sin embargo, agregó que si hubiese una costumbre periódica, el país no llegara a tales números de infectados.
También expresó que la población adulta cree que sólo los niños deben inmunizarse y no es así, pues todos lo ameritan. Asimismo instó al Gobierno Nacional a implementar la definición epidemiológica “aprovechamiento de oportunidades perdidas” y usar de aliados a los medios de comunicación y a las comunidades organizadas para informar de manera conciente y que genere calma en la población.
Cero antivirales
Igualmente expresó su preocupación y refutó la modificación relacionada con el tratamiento antiviral al no aplicarlo a ningún paciente e indicó que el brote de la influenza en el año 2009 aún se usaba tales medicamentos.
Asimismo, informó que la recomendación estándar internacionalmente, bien sean en caso de epidemia o en comportamiento estacional, la recomendación es usar antivirales. “Demás colegas y yo no entendemos porqué el Ministerio de Salud expulsó del tratamiento este componente”.
Finalizó resaltando que la Red Nacional Científica, la cual es quien reúne los entes académicos y médicos en Venezuela, emitió un comunicado el pasado lunes rechazando tal medida.
Prevención contra AH1N1
Principalmente para evitar enfermarse, la persona debe cubrirse la boca y la nariz con un pañuelo desechable al toser o estornudar y botarlo luego de usarlo. También se deben lavar las manos a menudo con agua y jabón o usar desinfectantes a base de alcohol. Igualmente se recomienda no tocarse los ojos para que no se propaguen los gérmenes y tratar de evitar el contacto directo con individuos infectados.
Si usted se enferma, deberá quedarse en casa y comunicarse con alguna atención médica donde se hayan identificado casos anteriores. Algunos síntomas son: fiebre alta, dolor del cuerpo, secreciones en la nariz, dolor de garganta, tos, mareo repentino, vómito y diarrea. Al momento de presentar estos indicios e ir a un centro de salud, el médico decidirá si necesita mayor atención.
Mientras que si es un niño, los signos de emergencia que requieren atención son: respiración agitada o dificultad, color azulado en la piel, que el menor no esté tomando suficientes líquidos, que presente somnolencia y luego prosiguen los síntomas mencionados anteriormente.
Anarell Romero Pino