El movimiento Gremios de Voluntad Popular considera que con el nombramiento de Argenis Chávez Frías como Director Ejecutivo de la Magistratura, “la dirección, gobierno y administración del Poder Judicial queda completamente en manos del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), lo que incrementa la contaminación política y crea un cortocircuito en la administración de justicia del país”.
A juicio del coordinador nacional del movimiento de profesionales y técnicos del partido progresista, Rafael Veloz, “la designación de un operador político en el corazón de la administración de justicia, lo que hace es instalar definitivamente ‘tribus rojas’ en los tribunales venezolanos, para ejercer presión en los nombramiento de los jueces en los circuitos judiciales, 85% de los cuales no son de carrera”, advirtió.
El también abogado afirma que “este incremento del tráfico de influencias termina es afectando al ciudadano de a pie, quien padece del alto índice de impunidad, uno de las principales causa de la delincuencia. Para que haya justicia tiene que haber independencia y probidad en el ejercicio de tan importante función pública”.
Concluye Veloz que “esta situación reafirma que en Venezuela vivimos en una autocracia, alejada de las normas internacionales consagradas en la Carta Interamericana Democrática, caracterizada por la falta de equilibrio e independencia entre los poderes públicos”.